Zapata, un héroe que ha perdurado en el arte y en el discurso político

Cultura

La vigencia de Emiliano Zapata, por encima de los demás personajes históricos de su generación, lo han convertido en una figura inevitable en la historia mexicana, tanto en el discurso político como en el ámbito artístico, dijo el periodista, poeta, escritor y médico Hermann Bellinghausen durante el conversatorio Las mil caras de Zapata.
En el marco de la exposición Zapata vivo, que estará abierta hasta el 3 de noviembre en el Museo Nacional de la Estampa (Munae), comentó que Zapata es el único héroe mexicano, a la altura del Che Guevara o Martín Luther King. “Es nuestra segunda marca de exportación, luego de Frida Kahlo”, aseguró.
Sin embargo, Bellinghausen aclaró que hubo momentos en los que el caudillo del sur no estuvo presente en el arte por varios motivos. Tras el movimiento muralista, los artistas mexicanos, sobre todo de la etapa de la Ruptura, con excepción de Belkin y Gironella, rechazaron su figura para alejarse de la escuela nacionalista, explicó.
Aseguró que después del movimiento zapatista chiapaneco de 1994 se re-funcionalizó la figura de Zapata de una manera más lúdica. Este episodio no solo renovó la imagen del líder revolucionario, “lo cual es secundario”, sino principalmente sus justas demandas, por lo que es y será un personaje del cual los gobiernos mexicanos no podrán desprenderse tan fácilmente, añadió.
Desde su aparición, hace más de un siglo, el caudillo del sur ha llamado la atención de propios y extraños y ha despertado tanto buenos como malos comentarios hacia su persona y su lucha. A partir de ahí, su figura ha aparecido en murales, pinturas, llaveros, grafitis, portadas de discos de rock y hasta en ropa interior, señaló el periodista.
Cada uno de los artistas que aparecen en la muestra Zapata vivo exponen a un guerrillero insurgente que no ha perdido sus valores, mediante piezas que podrían ser calificadas de posmodernas, ya que fueron construidas bajo diversos soportes técnicos, dijo.
Afirmó que la exposición temporal del Munae revitaliza al líder agrario, algunas obras incluso hacen mofa de él. “Zapata está con nosotros porque era un respetuoso de las tierras, su ideología más que comunista era anarquista y estaba más cerca de Flores Magón que de ningún otro ideólogo”.
Acompañado de los especialistas Gabriela Cano, Salvador Rueda Smithers y Luis Adrián Vargas, recordó que el poeta zacatecano Ramón López Velarde odiaba a Zapata porque, entre otras cosas, se había declarado seguidor de Madero.
Finalmente, destacó que Emiliano Zapata está más vigente que los demás personajes históricos de su generación, lo mismo que su lucha y su ideología.
Salvador Rueda Smithers, director del Museo Nacional de Historia, Castillo de Chapultepec, dijo que a pesar de las descalificaciones de sus opositores, en la literatura y la historiografía Zapata “va para arriba”.
Aseguró que a 100 años de su muerte, es el personaje más representado y recordado de nuestra historia, por encima de Carranza, Moctezuma o Felipe Ángeles, por mencionar algunos.
“Zapata es un símbolo de la justicia, añadió, y en el futuro su bandera será enarbolada para defender valores ecológicos porque su discurso es plástico y flexible”.
La historiadora Gabriela Cano se refirió al papel de las soldaderas en la revolución agraria zapatista y su importancia dentro de este movimiento. La Adelita, dijo, es una idealización de las soldaderas, mujeres rurales que efectuaron tareas indispensables para la sobrevivencia cotidiana de los ejércitos revolucionarios, persiste en muchos ámbitos como figura emblemática de las mujeres en la Revolución Mexicana.
“Hubo algunas que participaron en actividades de alto riesgo en tiempos de guerra, por lo que sus contribuciones fueron esenciales y merecen un estudio que profundice en la valoración cuantitativa y cualitativa de sus actividades”, finalizó.