Víctor Flores Olea, promotor de instituciones para el arte y la cultura de México

Cultura

La Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) lamentan el deceso del diplomático, catedrático y académico Víctor Flores Olea, quien fue el primer presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), que más tarde se convirtió en la actual Secretaría de Cultura.

La secretaria de Cultura, Alejandra Frausto Guerrero, lamentó el deceso del “extraordinario hombre de instituciones. Ejemplo para todo el mundo cultural, lo recordaremos por su generosidad y congruencia que le dieron trayectoria y vida impecables”.

Por su parte, la directora general del INBAL, Lucina Jiménez López, recordó al también fotógrafo y académico, quien al lado de distinguidos intelectuales rescató el bolero y la cultura urbana. “Su trayectoria como promotor de la cultura lo hizo merecedor de distinciones como la Medalla Simón Bolívar de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura”.

Durante su gestión en Conaculta (1988-1992) se creó el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes, con el objetivo de apoyar la creación artística y promover, difundir, incrementar y preservar el patrimonio cultural. Asimismo, formó parte del Consejo de Planeación y Políticas de Desarrollo que impulsó la conformación del Canal 22.

Flores Olea fue director de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México y se desempeñó en diferentes cargos en Relaciones Exteriores y en la Secretaría de Educación Pública.

Víctor Flores Olea (1932-2020) nació en la ciudad de Toluca, Estado de México, y falleció en Acapulco, Guerrero; realizó estudios de Doctorado en Ciencias Políticas, Escuela Práctica de Altos Estudios en París, Francia; además de formar parte del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades.

Entre sus actividades cotidianas destaca la de fotógrafo. En 1977 presentó una exposición individual en el Museo de Arte Moderno de la Ciudad de México, conformada por 180 imágenes; en 1982 participó en muestras colectivas en diferentes países.

En su faceta de escritor, destacan los cuentos Registro de los sueños (1990) y Tres historias de mujer (1999), así como las novelas Tiempos de olvido (1992) y Memoria en llamas (1995), además fue colaborador de los diarios Excélsior, El Universal y La Jornada.

En entrevista, el escritor Felipe Garrido lamentó el deceso del promotor cultural, y señaló que con Víctor Flores Olea hay un antes y un después en la historia de la cultura en México. Conaculta ha hecho toda la diferencia, dijo.

“El creador de ese organismo -como lo fue Carlos Chávez como fundador de Bellas Artes-, es un enorme gestor cultural y ahí está su obra”, agregó.

Entre los reconocimientos que obtuvo están las Palmas Académicas de la República Francesa, 1977; Orden del Cruzeiro Do Sul (Gran Cruz), 1977; Medalla Simón Bolívar de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), 1983; y la Orden Andrés Bello (1988).

En la trayectoria diplomática de Víctor Flores Olea destaca haber sido embajador de México en la entonces Unión Soviética (URSS), representante de México en la UNESCO. En la Secretaría de Educación Pública fue subsecretario de Cultura y vicepresidente de la Comisión de los Estados Unidos Mexicanos para la UNESCO y representante de México ante la ONU.