¿Qué sucede en la Asamblea General cuando los líderes mundiales se han ido a casa?

Internacional

Tras desaparecer la atención mediática global que genera el debate anual de alto nivel de la Asamblea General, la labor de ésta, como principal órgano deliberativo de las Naciones Unidas, se traslada a sus denominadas comisiones principales, donde se realiza la mayor parte del trabajo de la Organización.

Mientras que los seis días del «debate general» ocupan los titulares de los principales medios de comunicación con discursos políticos en los que participan reyes, presidentes y primeros ministros, las comisiones de la Asamblea rara vez acaparan el foco mediático y son noticia.

Tampoco ayuda demasiado a monopolizar la atención sobre estas reuniones, y lo que sucede en ellas, lo poco llamativos que resultan sus nombres: desde la Primera hasta la Sexta Comisión.

Sin embargo, estas abordan temas delicados y complejos como el desarme y la colonización, el crecimiento económico o la ayuda humanitaria, y transforman en acciones reales las medidas expuestas previamente por los líderes políticos y los altos funcionarios de las Naciones Unidas.

¿Qué hacen estas comisiones?

Debido al enorme volumen de trabajo que generan, la mayor parte de los esfuerzos de la Asamblea General se canalizan hacia las comisiones principales.

En ellas se discuten los temas, se elabora una propuesta común -por votación, si es necesario- y se envían las recomendaciones al Pleno de la Asamblea de los 193 Estados Miembros, para su consideración.

Sin embargo, algunos temas del programa, como la cuestión de Palestina, sólo se debaten en el Pleno de la Asamblea General.

Hay seis comisiones principales de la Asamblea General:

La Primera Comisión – Trata temas relacionados con el desarme y la seguridad internacional

La Segunda Comisión – Aborda temas relacionados con cuestiones económicas y financieras

La Tercera Comisión – Se encarga de asuntos sociales, humanitarios, de derechos humanos y culturales

La Cuarta Comisión – También conocida como «Comisión Política Especial y de Descolonización», se ocupa de los temas políticos no tratados en la Primera Comisión.

La Quinta Comisión – Trata sobre asuntos administrativos y presupuestarios

La Sexta Comisión – Aborda cuestiones jurídicas relativas al derecho internacional

Cada Comisión consta de un comité plenario integrado por los 193 miembros de la Asamblea General. Cada miembro del comité tiene un voto.

Según el Reglamento de la Asamblea, las decisiones de las comisiones se toman por mayoría de los miembros presentes y con capacidad de voto. Los miembros del comité también pueden tomar decisiones por consenso.

Además de las comisiones principales, la Asamblea General también incluye la Comisión de Verificación de Poderes, integrada por nueve miembros, tiene como mandato examinar las credenciales de los representantes de los Estados miembros e informar a la Asamblea General al respecto; la Mesa, que supervisa los progresos generales de la Asamblea; y varios otros órganos subsidiarios que pueden no estar integrados por todos los Estados miembros de la ONU.

¿Quién hace qué?

La Mesa de cada Comisión Principal se compone de un presidente, tres vicepresidentes y un relator, que elabora el informe oficial de la Comisión. Pueden ser elegidos el día de la elección del presidente de la Asamblea General o en la primera sesión oficial del comité.

De acuerdo con el reglamento de la Asamblea, ningún Estado miembro puede actuar como vicepresidente y presidente de una Comisión Principal durante el mismo período de sesiones. Además, el presidente de una comisión principal no puede emitir un voto, pero otro miembro de su delegación puede hacerlo en su lugar.

Los presidentes de las Comisiones Principales son también miembros de la Mesa, que está presidida por el presidente de la Asamblea General.

Muchos tipos de reuniones (una especialidad de las Naciones Unidas)

Los comités, al igual que su Asamblea General matriz, celebran reuniones oficiales o informales.

En las sesiones oficiales sólo pueden examinarse los temas que figuran en el orden del día de un determinado comité. Además, las decisiones -en forma de proyecto de resolución o de decisión- que se someten a la consideración del pleno sólo pueden adoptarse en una sesión oficial.

Una reunión informal se puede efectuar por una serie de razones. Esos encuentros pueden incluir sesiones de información a cargo de funcionarios o expertos técnicos de la Secretaría, interacciones con la sociedad civil, consultas o negociaciones.

Las decisiones del Comité no pueden tomarse en reuniones informales. Las reuniones informales tampoco suelen contar con servicios de traducción, que son, obviamente, una parte vital para llegar a un acuerdo.

Además de las reuniones formales e informales, las reuniones pueden ser abiertas o cerradas.

Las reuniones abiertas, como su nombre indica, son de libre acceso a todos los Estados miembros y observadores, entidades de las Naciones Unidas, la sociedad civil, los medios de comunicación y el público en general (las necesidades de seguridad y la disponibilidad de asientos pueden limitar el espacio reservado a los espectadores). Estas reuniones pueden retransmitirse, cubrirse por los medios de comunicación y sus actas pueden ser publicadas.

Por otro lado, las sesiones privadas cuentan con diferentes niveles de restricción. Generalmente, sólo los Estados Miembros, los observadores o los participantes invitados pueden asistir a estas reuniones. El diario de las Naciones Unidas indica qué sesiones son abiertas y cuáles son cerradas. Sin embargo, la decisión de cerrar una reunión abierta puede tomarse durante la reunión.