En la Jornada 2 de la “Semana de Innovación Sustentable”, con el tema “Bioarquitectura y agua para todos”, la presidenta de la Comisión de Ciencia, Tecnología e Innovación, diputada María Marivel Solís Barrera (Morena), llamó a impulsar iniciativas y reformas que abonen a fortalecer el desarrollo sustentable del país.
Indicó que se requiere que la política científica dé un giro y propicie el cuidado del medio ambiente, lo que permitirá una más viable y sana para las futuras generaciones.
Se necesita, afirmó, implementar medidas efectivas para garantizar los derechos de los pueblos indígenas y conservar la diversidad biológica, sin olvidar que “existen pendientes para garantizar la plena igualdad entre mujeres y hombres”.
Esta Semana de Innovación Sustentable, agregó, surgió para conocer las experiencias de organizaciones, pero en especial de jóvenes que requieren de una oportunidad.
Destacó que desde la Comisión se presenta una iniciativa a fin de impulsar a los emprendedores tecnológicos. “Queremos lograr que a los jóvenes que realizan de alguna manera actividades y proyectos de investigación se les impulse y apoye fuertemente para llegar, sobre todo, a la sociedad con proyectos sustentables”, añadió Solís Barrera.
En estas jornadas, expuso, participarán expertos en agroalimentos, energías limpias, arquitectura, agua, moda sustentable, reciclaje, embalaje, movilidad, ingeniería ecológica; además, se tratarán temas relacionados con educación, certificación e innovación. Afirmó que se dará seguimiento a las propuestas.
Recordó que en diciembre del año pasado la Comisión aprobó una reforma a la Ley de Ciencia y Tecnología, con el fin de que los proyectos de investigación sobre cambio climático sean considerados prioritarios. “Reiteramos el respaldo a todos los científicos, tecnólogos, al sector empresarial, para que sea prioritario atender el tema de proyectos enfocados al cambio climático”.
Empresas reutilizan casi el cien por ciento del agua
En su conferencia magistral, Eduardo J. Viesca de la Garza, presidente de la Comisión de Agua de la Concamin, expresó que del cien por ciento del líquido disponible que se tiene en el país, 77.8 por ciento es para fines agrícolas; alrededor del 15 por ciento, para uso público-urbano, y solamente el 5 por ciento se utiliza en la industria; por ello, la Concamin se sumó a la campaña de la cultura del agua y hoy las industrias cuentan con plantas de tratamiento de aguas residuales.
Mencionó que varias empresas reutilizan casi el cien por ciento del agua y el tratamiento que tienen es de primer mundo. La Agenda 2030 establece una industria moderna, competitiva, accesible, ambientalmente sostenible y socialmente responsable. “Estamos comprometidos con ello. Caminamos, industria y Gobierno, para alcanzar este objetivo y el establecido en materia de agua; sin embargo, se requieren recursos y otorgarle presupuesto a Conagua”.
Conocer impacto al ambiente de diversos productos
La fundadora del Centro de Análisis de Ciclo de Vida y Diseño Sustentable, S.A. de C.V. (CADIS), Nydia Suppen Reynaga, señaló que el conocimiento del ciclo de vida de los productos de uso diario, como el PET o el cartón, es fundamental para analizar el impacto de la huella ambiental en aire, suelo y agua, ya que esto coadyuva al diseño de estrategias orientadas al óptimo manejo de residuos.
En su conferencia magistral destacó que es fundamental que se integre una base de datos sobre el impacto de la huella del carbono, de la energía eléctrica, el gas, la infraestructura y que estos datos sean considerados en las políticas públicas orientadas al desarrollo sostenible.
Protección efectiva y manejo sostenible de los océanos
La directora general del Centro Intercultural de Estudios de Desiertos y Océanos (CEDO), Nélida Barajas Acosta, apuntó que México cuenta con una de las mejores políticas del mar, pero se requiere que sean ejecutadas y se asegure que el 30 por ciento de los océanos tengan protección efectiva y manejo sostenible.
Al impartir su conferencia magistral, consideró que cuidar el mar no significa no tocar, sino utilizarlo sustentablemente, por lo que propuso impulsar la pesca y el turismo de bajo impacto; es decir, que se practique ordenadamente, toda vez que se estima que los estados pesqueros contribuyen con el 43 por ciento del PIB del país.
Bioarquitectura
Jorge Rodríguez, arquitecto bioconstructor de Innova Tierra, expresó que se tienen enormes retos, pues no sólo es diseñar viviendas estéticamente aceptables, sino incorporar materiales sustentables y con menos daños al medio ambiente. Uno de los mayores avances, dijo, es el uso de residuos sólidos, lo que propicia viviendas nuevas y de bajo costo.
La cofundadora de Zamá (empresa de tratamiento de residuos), Paola Barranco, mencionó que se requieren leyes que incentiven la circularidad, motiven el consumo a granel, promuevan que los empaques sean reciclados y reciclables, mayor infraestructura de acopios y penalizar la generación de basura. Se necesita coordinación entre Gobierno, empresas comprometidas con el futuro y una sociedad educada en temas ambientales.
Verónica María Correa Giraldo, directora de Bambuterra, expresó que el sector de la construcción genera casi el 40 por ciento del total de las emisiones de dióxido de carbono, por lo que el uso del bambú puede ser una salida sustentable para este rubro, ya que, de impulsarse, se podría construir el 20 por ciento de viviendas que faltan en México.
Nallleli Amaya, directora de BioHarquitectura, expuso que el diseño de ambientes sanos permite proteger la vida y la salud de sus habitantes y el entorno, toda vez que un espacio arquitectónico con estas características puede consumir 75 por ciento menos energía, agua y gas que una edificación convencional.
Agua para todos
Por el Consejo Consultivo del Agua, María Elena Mesta mencionó que el derecho humano al agua debe priorizar la atención de las pequeñas comunidades que no tienen acceso al líquido para consumo personal y doméstico, conforme a los estándares establecidos de calidad y a las condiciones en las regiones. Se requiere innovación y tecnologías a fin de ofrecer servicios y establecer objetivos sustentables.
Roberto Parra Saldívar, profesor e investigador de la Escuela de Ingeniería y Ciencias del ITESM, señaló que el análisis del agua residual en diferentes puntos ayuda a detectar un virus e incluso el Covid-19. “Este tipo de protocolos deben establecerse en las grandes ciudades; hay que ver el agua como una huella sensible para cuidar la salud de las personas”.
La fundadora de Es Fácil Ser Verde, Jeinny Solís Saucedo, precisó que la ventaja del sanitario seco WCEco radica en que no usa agua; no contamina tierra fértil, es de bajo costo y de fácil colocación. “Estos productos ayudan a afrontar el problema de agua, pues en México hay 145 mil escuelas primarias sin sanitarios, y 9 millones de hogares no cuentan con estos servicios”.
El director de Educación Socioecológica de Isla Urbana, Delfín Montañana Palacios, relató que la Ciudad de México enfrenta una crisis hídrica, que podría ser atendida con la implantación de sistemas de captación de agua; es decir, mediante la cosecha de lluvia. Subrayó que este método terminaría con la ineficiencia y desigualdad del abasto en las alcaldías porque hay zonas donde las personas viven con veinte litros y otras donde lo hacen hasta con 800 litros al día.
Arturo Aguirre Cortez, cofundador Xinampa, planteó impulsar la creación de invernaderos urbanos que permitan la producción de alimentos de la canasta básica a través del método hidropónico. Agregó que esta técnica no sólo fomenta el ahorro de agua, sino la autosuficiencia alimentaria.
Finalmente, Emiliano González Jiménez, representante del Proyecto SIIUCA, explicó que el propósito de su trabajo es captar agua por medio de las farolas del alumbrado público, lo que coadyuvaría a disminuir las huellas de carbono en el medio ambiente.
