El presidente Andrés Manuel López Obrador informó que el pasado martes la Secretaría de la Defensa Nacional realizó la destrucción masiva de 19 mil 317 armas en 26 estados de la República.
En conferencia de prensa matutina, el titular de la Sedena, Luis Cresencio Sandoval, explicó que se trata de armas que han sido aseguradas y que por ningún motivo serán utilizadas por las Fuerzas Armadas.
Adelantó que este día se replicará la actividad en Tabasco y Chiapas; el 9 de diciembre en Quintana Roo, Campeche y Yucatán, lo que sumará un total de 19 mil 919 armas destruidas.
Dio a conocer que el 70 por ciento del tráfico ilegal de armas proviene de Estados Unidos. El 30 por ciento restante, tiene manufactura en España, Italia, Austria y otros países, cuyo ingreso es por la vía marítima generalmente.
El secretario expuso que el trasiego se hace también en vehículos particulares —incluso en sus estructuras internas—, ferrocarriles y aduanas.
“En esta administración el señor presidente nos instruyó a cambiar el sentido de la revisión de nuestros puestos militares de seguridad. Anteriormente hacíamos la revisión de sur a norte en donde buscábamos el aseguramiento de drogas. Tenemos los puestos en la frontera norte que hacen la revisión de norte a sur y ahí es donde hemos revisado la detección de camiones, de vehículos de todo tipo con armamento, municiones y dinero”, abundó.
El presidente López Obrador recordó que el procurador de Estados Unidos, William Barr, estará en México para llevar a cabo reuniones con el propósito de fortalecer las relaciones de cooperación bilateral.
“Desde luego dos temas que se tienen que tratar es la introducción de armas, dólares y droga (…) Estamos planteando que cuando menos del lado estadounidense haya control de salida de armas y de dólares, cuando menos. Estos son los planteamientos. Tenemos 3 mil 180 kilómetros de frontera y tiene que haber cooperación en temas migratorios, en estos temas, drogas, tráfico de armas, numerario y eso es el propósito. Hay disposición de parte de los gobiernos”, puntualizó.
El mandatario dejó claro que en esta administración no se permitirá la intervención extranjera, particularmente en materia de seguridad. Hizo referencia al operativo ‘Rápido y Furioso’ que se implementó en gobiernos anteriores, el cual calificó como un “rotundo fracaso”.
“Eso, si recuerdan, fue una violación flagrante a nuestra soberanía porque se permitió que entraran armas para supuestamente seguir a miembros del crimen organizado y esas armas se perdieron. Luego se demostró que se usaron para cometer crímenes. Esos acuerdos no se permiten”, remarcó.
