«Miguel León Portilla supo mostrar al mundo la grandeza de nuestra identidad mexicana, en su conformación y vivencia actual»

Cultura

La Conferencia del Episcopado Mexicano se une a la pena de los familiares, alumnos, colegas y amigos del DOCTOR MIGUEL LEÓN PORTILLA, gran intelectual católico, cuyos estudios y obras interdisciplinares, nos han ayudado a comprender la cultura del México precolombino. Discípulo del sacerdote, misionero y canónigo de la Basílica de Guadalupe, Don Ángel María Garibay, quien le dirigió su tesis doctoral y lo introdujo al conocimiento de la cultura náhuatl. 

Reconocemos en él, a un promotor de la cultura del encuentro, a la cual llama el Evangelio y ha convocado el Papa Francisco, capaz de construir puentes y hacer dialogar a distintos mundos, el mundo precolombino con el mundo actual; la filosofía, las lenguas y la historia; el mundo indígena con el México mestizo, entre otros. Con el fin de desvelar la verdad y el sentido de los acontecimientos históricos.

El 26 de septiembre de 2014, la Universidad Pontificia de México, con el beneplácito de la Congregación para la Educación Católica de la Santa Sede, le otorgó el Doctorado Honoris Causa, en reconocimiento a uno de los mejores estudios del Nican Mopohua, documento indígena fundacional del Acontecimiento Guadalupano.

Don Miguel supo mostrar al mundo la grandeza de nuestra identidad mexicana, en su conformación y vivencia actual. Muchas son las instituciones y centros de formación que fecundó e impulsó. Sus más de cuarenta libros, y cientos de escritos académicos, quedarán en las bibliotecas de México, y muchas otras partes del mundo, para ayudar a comprender nuestro pasado, presente y futuro.

Además de agradecer y reconocer su brillante carrera académica, como docente e incansable investigador, que desarrolló en la Universidad Nacional Autónoma de México, apreciamos mucho su preocupación social por los pueblos indígenas, así como por la promoción de la educación, la vida universitaria y la investigación científica.

Apreciamos a un ser humano generoso y cálido, que integró constantemente el diálogo entre la fe y la ciencia. Su vida es ejemplo a seguir para todos los intelectuales, académicos, maestros, y todos los fieles clérigos, religiosos y laicos católicos, así como por hombres y mujeres de buena voluntad.

+ Rogelio Cabrera López

Arzobispo de Monterrey y

Presidente de la CEM

 

 

+ Alfonso G. Miranda Guardiola

Obispo Auxiliar de Monterrey y

Secretario General de la CEM

+Enrique Díaz Díaz

Obispo de Irapuato y

Responsable de la Dimensiónde Pastoral Educativa

y de Cultura de la CEM