Licenciatura en Diseño Industrial de la UAM obtiene su primera acreditación internacional

Cultura

La Licenciatura en Diseño Industrial de la Unidad Azcapotzalco de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) obtuvo su primera acreditación internacional –vigente por cinco años, de octubre de 2020 al mismo mes de 2025– al cumplir con los criterios establecidos por la agencia chilena AcreditAcción.

Con ello, este programa de estudios adquirió, no un premio sino el compromiso de mejorar continuamente sus procesos de enseñanza-aprendizaje, acorde con el “acompañamiento por parte de la acreditadora para ver cuáles son nuestras áreas de oportunidad” y hacerlas avanzar, señaló el maestro en Diseño Industrial Sergio Dávila Urrutia.

El coordinador de dicha opción educativa añadió que ésta ha sido avalada en el ámbito nacional por el Consejo Mexicano para la Acreditación de Programas de Diseño A.C. (Comaprod), una entidad reconocida por el Consejo para la Acreditación de la Educación Superior (Copaes); sin embargo, “la idea es hacer universales nuestros planes para lograr, entre otros propósitos, que los alumnos cuenten con esta ventaja cuando vayan al extranjero a realizar su movilidad”.

El investigador de la UAM señaló en entrevista que la actual gestión de la División de Ciencias y Artes para el Diseño (CyAD), de la citada sede universitaria, está comprometida con la internacionalización, por lo que “hemos hecho los esfuerzos para pertenecer a otras asociaciones” de índole mundial.

Tal es el caso de Diseño de la Comunicación Gráfica, que alcanzó esa meta por un periodo de cinco años con la misma instancia del país sudamericano, así como de la Licenciatura en Arquitectura, con “una certificación que cumple todos los estándares globales”.

Diseño Industrial recibió el aval por cinco años, hasta octubre de 2025, pero “debido a que los pares no pudieron revisar nuestras instalaciones e hicieron su trabajo a distancia esperamos que esto ocurra en mayo de 2021, cuando puedan realizar el análisis con más detalle, con lo que prevemos una extensión de la acreditación por dos años más”.

La certificación implicó una labor de más de un año, “en el que nos solicitaron datos que ya se encuentran organizados en los anuarios estadísticos, tanto en la Rectoría de la Unidad como en la División, aunque un aspecto importante del procedimiento fue la celebración de encuestas sobre la Licenciatura que los evaluadores hicieron a alumnos, egresados, profesores y empleadores, las cuales nos dieron información que podíamos comparar y revisar con la agencia chilena para ver los puntos flacos y poder hacer un plan de mejora”.

Aun cuando la aplicación de cuestionarios fue complicada porque se hizo en tiempos de huelga y después durante la pandemia del COVID-19 resultó evidente, por ejemplo, la necesidad de incrementar el número de académicos en el turno vespertino. Otra problemática identificada fue que se requiere mayor vinculación con los empleadores, por lo que la dirección divisional hizo un esfuerzo por mejorar las prácticas profesionales y tener más conversaciones con ellos.

La Licenciatura cuenta con una infraestructura destacada que se refleja en los talleres que se imparten, ya que existe uno para cada material con el que los estudiantes trabajan durante sus cursos, incluidos metálicos, fibrosos, pétreos, plásticos, impresión 3D, electrónica y en fechas recientes se abrió el Laboratorio de Joyería.

Los espacios son bastante amplios y están equipados con gran cantidad de herramientas y maquinaria, además de que en los últimos años se han actualizado, al haberse adquirido algunos para control numérico computarizado e impresoras 3D.

Otra fortaleza la constituye el personal docente, ya que la mayoría es de tiempo completo y, por lo tanto, está dedicado a la academia, la investigación, la publicación de artículos y la difusión de la cultura.

Los cuerpos departamentales son otro elemento diferenciador, pues al estar establecidos de ese modo, cada uno revisa “que se publique, investigue, desarrollen materiales y difunda la cultura”.

Desde la fundación de la División hubo un principio metodológico sobresaliente; en aquel momento no se consideraba pedagógico, pero funciona hasta ahora como eso y se basa en el Modelo General del Proceso de Diseño. También recoge las bases para construir una cuarta área del conocimiento, una metodología, filosofía y todo aquello que dejaron el arquitecto Pedro Ramírez Vázquez, primer rector general de la Casa abierta al tiempo, y Martín Gutiérrez Martínez, Doctor Honoris Causa por la UAM y primer director de la División de CyAD, entre otros maestros.

La infraestructura, los académicos, la organización departamental y el modelo pedagógico de la Licenciatura conforman “claros diferenciadores” respecto de otras escuelas en la disciplina del país, pues muy pocas tienen a casi todos los profesores de tiempo completo y cuando se lleva a cabo una acreditación, esta situación hace la diferencia, puntualizó el docente.

Con un total de 236 académicos de la División –de los cuales 209 son de tiempo completo, 86 integrados al Programa de Mejoramiento del Profesorado y 16 al Sistema Nacional de Investigadores– la Licenciatura en Diseño Industrial ha formado más de dos mil 600 profesionales y registra una matrícula que ronda los 850 alumnos, es decir, al año egresa en promedio cien hombres y mujeres.

Una de las características de esta opción educativa es su enfoque social, porque “siempre estamos participando con comunidades y buscando los proyectos de servicio social para atender ciertas problemáticas, resolviéndolas desde la metodología del diseño con el fin de aportar soluciones físicas y tangibles”.

Este campo ha tenido muchos cambios en años recientes y es relevante la innovación, es decir, “cómo diseñamos bienestar para todas las personas, por lo que nuestro modelo general en la materia se combina con las nuevas maneras de ver el diseño como generador de renovación”, contribuyendo a la transformación, a incrementar la sustentabilidad y a brindar alternativas a los asuntos de género, entre muchos otros retos.

Los egresados de la Licenciatura no son definidos por una epistemología en este ámbito disciplinar, sino por una tendencia para solventar desafíos, producir empleos y estar al servicio de la sociedad; “están por un diseño que sea útil, no sólo a empresas y al comercio, sino a la comunidad”.

Por ello, en una visión de futuro “vamos educando en forma transdisciplinar para que el estudiante se comprometa en atender cuestiones holísticas y vea cómo amalgamar con otras profesiones para satisfacer asuntos sociales”.