Tras el éxito de La Mort de Louis XIV (The Death of Louis XIV) con Jean-Pierre Léaud como el Rey Sol (Proyecciones Especiales, 2016), el inclasificable Albert Serra confirma con Liberté su preferencia por los elencos eclécticos de actores profesionales y aficionados. Presentación en Un Certain Regard.
¿Cuáles fueron sus fuentes de inspiración antes de comenzar a trabajar en esta película?
Mi pasión por el siglo XVIII francés. Me encanta todo lo relacionado con esta época, incluso las contradicciones fatales que terminaron por llevar a la sociedad hacia la revolución. Su libertad y sus caminos imprevisibles siempre me inspiran. Sus personajes también: Rousseau, Voltaire, Sade, Casanova… De cierto modo, Fragonard y Boucher también han sido referentes.
¿Cómo fue el ambiente durante el rodaje? ¿Podría contarnos alguna anécdota?
La película trata de una zona de «crucero», donde todos están en el mismo nivel: ricos y pobres, bellos y feos, hombres y mujeres, amos y criados… Y con el elenco he hecho algo similar: he mezclado actores famosos con técnicos convertidos en actores, aficionados encontrados gracias a Facebook, gente de mi puedo, actores de teatro… Sin ninguna regla, a excepción de mi gusto por el caos y mi odio por la vanidad de los actores.
¿Qué nos puede decir sobre sus actores?
Siento un gran afecto por todos ellos. En algunos aspectos son mejores que yo. También son frágiles, algo que me dio gusto constatar durante el rodaje. Creo que es necesario transmitir cierta inocencia. En la vida real, no me gustan las personas frágiles, así que fue como un sueño estar allí con ellos y que su fragilidad no me molestara. Durante el rodaje, estamos obligados a aceptar lo inaceptable, tanto ellos como yo. Y eso me encanta.
¿Qué le ha enseñado el rodaje de esta película?
Aprendí a no fiarme de mis experiencias anteriores como director, ya que puede ser el principio del fin. Soy muy sensible a ello. Y también aprendí una lección cruel gracias a un error enorme que cometí, pero es algo muy personal, no puedo hablar al respecto.
¿Cuál fue su inspiración para convertirse en cineasta?
La intuición de que con la tecnología digital el rodaje de una película podía ser una experiencia sumamente lúdica. Mis fuentes de inspiración eran mis propios amigos, la música popular y el cine experimental de los años 1960, así como todos los artistas vanguardistas clásicos de principios del siglo XX. También me inspiraron algunos críticos de cine de los años 1960, su influencia en mi vida ha sido muy importante.
¿Qué opina de la situación actual del cine español?
Es terrible, no hay futuro. Las fundaciones de cine parecen haber retrocedido 60 años, como en la época de la dictadura, están totalmente cegadas y son sumamente mediocres. No respetan a los verdaderos cineastas, créame que la situación es dramática.
¿Qué puede contarnos de su próximo proyecto?
Se titula I AM AN ARTIST y trata de un joven artista contemporáneo. Es satírico y conmovedor a la vez, y será una descripción original del proceso interno de creación, sin estereotipos, por su puesto.
