“Ley de Austeridad”: discurso de campaña y un símbolo más con el que AMLO pretende retener la confianza y esperanza de la población, sostiene el PRD

Deporte

El Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática en la Cámara de Diputados, fustigó el hecho de que -por orden del Presidente Andrés Manuel López Obrador- se haya aprobado este último día de sesiones, la Ley Federal de Austeridad Republicana del Estado, sin un dictamen definitivo, ni la publicidad suficiente como marca el reglamento, y sí con la negligencia de las comisiones unidas de Hacienda y de Presupuesto que se subordinaron ante la advertencia del Ejecutivo de presentar memoranda y decretos si no se le cumplía.

Al fijar la postura de dicho grupo parlamentario, Antonio Ortega sostuvo que “la Ley de Austeridad es un discurso de campaña, un símbolo más con el que se quiere retener la confianza y la esperanza” (de la población hacia este gobierno) pues el tema de la “austeridad” es popular. Sin embargo, hizo notar que, por la premura y el desaseo para su construcción y aprobación, esta nueva ordenanza repetirá el camino de la Ley de Remuneraciones”: Amparos, suspensiones, dificultad para aplicación y, sobre todo, que no se quiere aceptar su valor supremo como ley”.

Recalcó que “esta ley es una mala decisión del presidente”. Es –dijo- un acto innecesario de los diputados que pusieron por debajo de su responsabilidad a su autonomía; pues enfatizó que, de los treinta artículos que la integran, 26 están ya contemplados en las leyes: General de Responsabilidades Administrativas; Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria; de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público; de Obras Públicas y Servicios; General de Comunicación Social; Federal de Remuneraciones de los Servidores Públicos, y Federal de los Trabajadores al Servicio del Estado, entre otras.

“Estoy plenamente seguro, añadió, de que una ley no va a resolver el problema porque, si así fuera, a partir de las próximas horas hagamos mil leyes más para solucionar las dificultades del país y podremos darnos cuenta de que eso no va a ocurrir”, insistió

El legislador federal enfatizó que este instituto político propuso una moción suspensiva porque el procedimiento detrás de la presentación, no solo tuvo negligencia de parte de las comisiones que la presentaron, sino porque el presidente López Obrador ordenó y, prácticamente, amenazó a sus parlamentarios de que, si esta Cámara no la aprobaba en el período que hoy concluye, se vería obligado a presentar memoranda y decretos.

“Él cree (y su paso como Jefe de Gobierno de la entonces Ciudad de México lo demuestra), que se puede gobernar a partir de memoranda y decretos. Piensa como rey, que basta clavar en una puerta o en un árbol una ordenanza donde se haga saber a los ciudadanos qué quiere para que, inmediatamente, todos se preparen a cumplir”, fustigó.

“Al acatar sus deseos, finalizó, estamos generando legislaciones contrapuestas, conflictos jurídicos, debilidades legales, antinomias que no van a resolver de manera mágica el problema del descuido y de los abusos del gasto público”, concretó.