Las mujeres siguen excluidas en los procesos políticos o de paz

Internacional

Unidas en un debate del Consejo dedicada al rol de la mujer en escenarios de paz y seguridad. La discusión busca específicamente pasar de los compromisos a los resultados en preparación de la conmemoración del vigésimo aniversario de la resolución 1325 del Consejo, que versa sobre la promoción y participación de la mujer en la esfera política.  

António Guterres, manifestó su preocupación por la falta de avances en este campo.

“Con un apoyo tan fuerte y un consenso tan generalizado, un observador podría pensar que las cosas están mejorando sustancialmente. Pero lo triste es -y debemos ser francos al respecto- que el compromiso que siempre se refleja en torno a esta mesa no se traduce en un cambio real en todo el mundo.  No está llegando lo suficientemente rápido o lo suficientemente lejos”, analizó.

Guterres destacó que casi dos décadas después de la aprobación de la resolución 1325, las mujeres continúan excluidas de los procesos políticos y de paz.

Como muestra de ello destacó que los acuerdos de paz se adoptan sin tener en cuenta las necesidades y prioridades de las mujeres y las niñas, que solamente un 0,2% de la ayuda bilateral en situaciones de conflictos se destina a organizaciones de mujeres, que crece el número de ataques a las defensoras de los derechos humanos y que perdura la violencia sexual como arma de guerra.

No obstante este escenario, el Secretario General recordó que el tema es una prioridad absoluta en su agenda y reportó avances en Yemen, Guinea-Bissau y Siria.

En Guinea-Bissau destacó que las mujeres lideraron una movilización sin precedentes en favor de las leyes de paridad que se tradujo en un número de candidatas y votantes nunca antes visto en el país que logró la paridad en los puestos ministeriales.

Con relación a Siria, señaló que alrededor del 30% de los miembros del nuevo Comité Constitucional son mujeres.

La ONU predica con el ejemplo

En cuanto a las acciones emprendidas por la Organización, señaló haber dado instrucciones concretas a todos los jefes de misiones políticas y a sus enviados especiales de informar sobre sus esfuerzos para promover la participación directa de la mujer en todas las etapas de los procesos de paz.

Del mismo modo, destacó que se trabaja para acabar con la explotación y los abusos sexuales en las operaciones de mantenimiento de la paz y que se busca incrementar la participación de la mujer en las mismas.

“Los incidentes de explotación y abuso sexual se han reducido a la mitad, y finalmente estamos cambiando el porcentaje de mujeres en el componente militar y policial de nuestras operaciones. He nombrado a muchas más mujeres como jefas y subjefas de misión, y estamos adoptando medidas de emergencia para lograr la paridad de género”, informó Guterres.

Hay que pasar de las palabras a los hechos

Por su parte, la directora ejecutiva de ONU Mujeres, Phumzile Mlambo-Ngcuka, destacó que el cambio necesario “no es tan real como debería ser” y “que debemos tratar de cerrar la brecha entre las palabras y la acción”, tal como lo expresó previamente el Secretario General.

Igualmente reiteró su posición formulada el año pasado de que ni las Naciones Unidas ni los Estados miembros deberían apoyar los procesos de paz que excluyen a las mujeres “porque si se adopta una posición al respecto, las cosas cambiarán”.