La sambucus nigra de Perú reduce el colesterol malo, sin alterar el bueno

Cultura

La reducción de concentraciones de colesterol malo en el flujo sanguíneo, sin alterar el bueno es posible con la planta del sauco, según reveló un estudio a 73 personas que presentaron resultados positivos al consumo cotidiano de la también llamada sambucus nigra, originaria de Perú, sostuvo el doctor Iván André Torres Marquina.

Al participar en el Seminario internacional farmacéutico, llevado a cabo en la Unidad Xochimilco de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), indicó que desde hace dos décadas se ha dedicado a indagar el conocimiento sobre la flora de Cajamarca, en ese país andino, y encontró recientemente el aporte terapéutico de dicha especie.

El vicerrector de Investigación de la Universidad Privada Antonio Guillermo Urrelo en Cajamarca afirmó que “hemos trabajado una forma sólida que cumple todos los estándares farmacéuticos y estamos avanzando también en la elaboración de cápsulas que mejoren la absorción, ya que desde 2017 tenemos un proyecto con la Universidad Complutense de Madrid para el desarrollo de fitomedicamentos”.

El objetivo de conocer las propiedades de las plantas y apropiarse de ellas para fines científicos implica, por un lado, asuntos de salud pública y, por otro, un reconocimiento “a nuestro origen cultural como sociedades de tradición prehispánica”.

En el primer caso es una realidad que en ambos países el sistema de salubridad es precario, por lo que resulta habitual que la población busque opciones para atender sus padecimientos, mediante el uso de las plantas medicinales, ya que “todos en algún momento hemos utilizado alguna infusión”.

Desde el clásico té de manzanilla o el de orégano hasta composiciones más complejas como el aceite de sauco con fines más específicos; se trata de un ejercicio común entre la gente rural por influencia de sus antecesores, quienes confiaban en los beneficios de los alimentos.

En este punto se conecta la tradición cultural de las comunidades originarias, por lo que para conocer de primera mano las propiedades de alguna planta es necesario convivir con los pobladores nativos más de un año, como mínimo; de ellos se aprende directamente los beneficios de sus cultivos.

El conocimiento tradicional, que va de generación en generación, es un factor para el uso terapéutico de las plantas, donde el componente económico influye porque no todas las personas “podemos tener acceso a una medicina, pero sí tenemos dicho saber”, subrayó el también Presidente de la Conferencia Iberoamericana de Facultades de Farmacia.

Tanto Perú como México son naciones mega-diversas, en las que “tenemos 28 de los 32 climas, pisos ecológicos múltiples, podemos ir desde el nivel del mar hasta los cinco mil metros de altura y contamos con zonas geográficas diversas”, y esos múltiples pisos ecológicos contribuyen a que las especies generen productos de interés medicinal, explicó el especialista en Farmacia y Bioquímica.