La película El gerente de recursos humanos de Eran Riklis será comentada por Myriam Moscona

Cultura

La novelista, poeta y periodista Myriam Moscona participará en el ciclo Charlas de cine y literatura: Migración y exilio del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura con una intervención al final de la proyección de la cinta El gerente de recursos humanos (2010), coproducción de Israel, Alemania, Francia y Rumania, dirigida por Eran Riklis, el lunes 27 de mayo a las 18:00 en la Sala 4 de la Cineteca Nacional.

 “Esta película, de la que haré algunos comentarios, es una adaptación de la novela Una mujer en Jerusalén de Abraham B. Jehoshúa, uno de los escritores vivos más importantes de la literatura contemporánea israelí, y quien ha sido comparado con William Faulkner, uno de los grandes autores estadounidenses. Y diré que es un filme que tiene un telón de fondo, desde luego político, pero con muchas veladuras. Es interesante constatar cómo uno puede hablar de una situación política sin aludir a ella directamente”, refiere Moscona.

 El gerente de recursos humanos narra la historia de una mujer rumana que, por cuestiones de pobreza, va a Israel, donde trabaja en una panadería, y muere en un atentado. Dicha empresa, muy prestigiosa, tiene un problema ético por no haber hecho notar la ausencia de esta trabajadora.

 La panadería, por un lado, tiene que resolver este problema ético y, por otro, proteger su propia imagen y prestigio. Por ello se hace cargo de la recuperación del cuerpo de la mujer. La película, entonces, se convierte en una especie de tragicomedia; da un giro y se transforma en una road movie, pero con un féretro.

 “Es interesante esta cinta porque se enlaza con un problema que estamos viviendo en el siglo XXI con todo el desplazamiento masivo de trabajadores que tiene que ir a buscar su suerte a otros lugares porque de donde son y donde viven hay una situación de violencia o de pobreza. La película no habla de eso. No obstante, ahí está como telón de fondo. Y me parece que el director eligió con un buen tino un texto muy adecuado para llevarlo a la pantalla grande.

 “El cine de Israel ha tenido un cambio muy positivo porque, al igual que el de India, era malísimo, y en fechas recientes ha tenido proyectos muchas veces con presupuestos bajos y mucha imaginación, pero anclados a un buen guion.

 “Considero que este filme fue realizado con una cierta modestia y con un buen guion. Los diálogos son buenos y la cinematografía es correcta. Y finalmente me parece bien que exista este ciclo de cine y literatura”.