La obra de los artistas mexicanos más destacados del siglo XX vuelve al Museo Nacional de Arte

Cultura

El Museo Nacional de Arte (Munal) reinstaló su acervo del siglo pasado en la exposición permanente XX en el XXI. Colección del Museo Nacional de Arte, que había estado ausente de las salas por compromisos expositivos internacionales. El propósito es “difundir a los grandes artistas que conformaron el movimiento modernista mexicano y que hoy siguen vigentes”, mencionó Carmen Gaitán, directora del recinto, durante la inauguración llevada a cabo la tarde de ayer.
Con curaduría de María Estela Duarte, Abraham Villavicencio y David Cáliz, la muestra se divide en cinco núcleos, que siguen el orden cronológico y temático: Despertar de la modernidad, con ejemplos de Ángel Zárraga, Joaquín Clausell, Dr. Atl, Germán Gedovius, Roberto Montenegro, entre otros; Arte y revolución, donde destacan Ezequiel Negrete, Manuel Rodríguez Lozano, Leopoldo Méndez y Ramón Alva de la Canal.
En Vanguardia y reconstrucción nacional sobresalen Miguel Covarrubias, Carlos Orozco Romero, Lola y Germán Cueto y Frida Kahlo; le sigue Reinvención de dos géneros: retrato y naturaleza muerta, con obras de María Izquierdo y Rufino Tamayo, y en Hitos de la Escuela Mexicana de Pintura se encuentran José Clemente Orozco, David Alfaro Siqueiros y Diego Rivera, por mencionar parte del grupo de artistas incluidos.
Pintura, escultura, grabado, dibujo, fotografía, textil y documentos conforman la exposición XX en el XXI, pertenecientes “a artistas modernos y de una gran manufactura. Son obras entrañables y de diversos exponentes que pueden convivir en una museografía y selección de guiones curatoriales de nuestros curadores e investigadores”, explicó Carmen Gaitán.
Tres ejemplos de las obras son: Mateo, el negro (El pescador de Mallorca), óleo sobre tela de Roberto Montenegro, donde el autor muestra una voluntad explícita de crear ambientes de lujo visual casi fantástico y donde vegetación y pescados labran un marco suntuoso a la figura broncínea del pescador.
La ola roja, óleo sobre tela de Joaquín Clausell, exponente de la renovación de los géneros pictóricos que experimentó el arte mexicano desde las postrimerías del siglo XIX. Con ecos del movimiento impresionista y no exento de un simbolismo finisecular, el artista confiere a la naturaleza un estado anímico y una fuerza material desusada hasta entonces en el tratamiento del paisaje mexicano.
Y La casa sobre el puente, óleo sobre tela realizado por Diego Rivera en 1909, en la ciudad de Brujas, de carácter simbolista, cuya factura —con chorreos pictóricos y formas desdibujadas— demuestran la maestría de un joven artista en Europa.
La exposición XX en el XXI, Colección del Museo Nacional de Arte, puede visitarse de martes a domingo, de 10:00 a 18:00. Los domingos la entrada es libre.