La Cámara de Diputados rememora el 53 aniversario de los caídos en la Plaza de las Tres Culturas, en Tlatelolco

Nacional

Diputadas y diputados de los siete grupos parlamentarios externaron sus comentarios con motivo del Aniversario de los caídos en la Plaza de las Tres Culturas, en Tlatelolco, en la lucha por la democracia, el 2 de octubre de 1968.

Movimiento estudiantil despertó conciencias y unió al pueblo

El diputado José Miguel de la Cruz Lima (Morena) pidió un minuto de silencio en memoria de las víctimas del movimiento estudiantil del 68. Enfatizó la deuda que tienen los responsables de aquel régimen con el pueblo de México, ya que “no han asumido su responsabilidad en estos acontecimientos y, por el contrario, se justifican.

Destacó que el movimiento estudiantil era un grito de libertad, democracia y reformas. “Honramos la memoria de los caídos en aquellos hechos, les damos las gracias, porque representan esa coyuntura que cambió la manera en que los gobiernos actuaban, sin ningún respeto y un régimen incapaz de dar solución a los grandes rezagos, con sed de justicia; además, despertaron conciencias y unieron a un pueblo completo”.

Jóvenes del 68 tenían legítimas aspiraciones

Del PAN, el diputado Marco Antonio Almendariz Puppo dijo que “los jóvenes de 1968, como los de ahora, tenían legítimas aspiraciones de crecer, prepararse, salir adelante y luchar por una sociedad más justa, anhelos y sueños que ni ayer ni hoy, ni nunca, ni nadie puede acabar con ellos”.

Destacó que “hoy es tiempo de ver hacia adelante, pero sin olvidarnos del pasado, de ver por los jóvenes de México, su educación y mejores oportunidades para todos”. Recalcó que hoy “es momento de renovar nuestro compromiso con la autonomía de la UNAM, con la excelencia educativa del Politécnico, con las universidades públicas y centros de investigación del país”.

Construir un país caracterizado por la tolerancia

Hiram Hernández Zetina, diputado del PRI, señaló que el 2 octubre de 1968 las balas de la cobardía, intolerancia, soberbia e indiferencia cambiaron para siempre al país, terminando con la vida de jóvenes universitarios idealistas. “Hoy recordamos con dolor e indignación a los jóvenes estudiantes y luchadores que alzaron la voz, con el único objetivo de encontrar un diálogo que les fue negado por un Estado ciego, sordomudo y represor”.

Hizo votos para que nunca y bajo ningún motivo, ninguna persona sea asesinada o reprimida por expresar sus ideas. Se manifestó por construir un país con instituciones sólidas, caracterizado por la tolerancia, la libre manifestación de ideas y en donde ninguna persona sea perseguida por preferencias políticas, religiosas, sexuales o de otra índole.

Los jóvenes no deben ser violentados ni criminalizados

El diputado Gilberto Hernández Villafuerte (PVEM) comentó que el compromiso como sociedad hoy debe ser que en nuestro país los jóvenes nunca más sean criminalizados, reprendidos, violentados, y que quienes se atrevan a levantar la voz frente a los abusos cometidos desde el poder, no sean perseguidos ni encarcelados.

“A 53 años del 2 de octubre de 1968 nos queda reconstruir la memoria histórica, conmemorar aquel despertar ciudadano, esclarecer los hechos para acceder a la verdad sobre lo que realmente pasó y sobre quiénes son los responsables de aquella noche triste en Tlatelolco, cuando la sangre de nuestros jóvenes tiñó de rojo la Plaza de las Tres Culturas”.

Abrió camino a la democracia y a la libertad de expresión

Por el grupo parlamentario del PT, el diputado Alberto Anaya Gutiérrez recordó que fue una situación que hizo historia en este país, que significó un parteaguas, siendo el acto represivo más sobresaliente. “No es una situación que surgiera de la nada, el entorno mundial era una rebeldía, fue una situación acumulativa y expresión de un hartazgo”.

Señaló que son hechos que no debemos dejar de lado y nos tiene que mover a la reflexión porque, comentó, fue un crimen de Estado planeado y ejecutado. Sin embargo, no hay quien se señale como responsable; es algo que tiene que estar en la conciencia de la sociedad, porque significó el camino a la democracia y a la libertad de expresión.

Obligados a defender la democracia y la libertad

Por MC, la diputada Amalia Dolores García Medina afirmó que los estudiantes del 68 sembraron el camino para poner fin al sistema del partido casi único. “Estamos obligadas y obligados a defender la democracia y la libertad. El 2 de octubre no se olvida”.

Recordó que el Gobierno Federal difundió que el movimiento era una parte de la conjura comunista para desprestigiar a México por los Juegos Olímpicos; no obstante, no comprendía que era un anhelo antiautoritario que recorría el planeta.

El movimiento simboliza una lucha de gran trascendencia

El diputado Marcelino Castañeda Navarrete (PRD) resaltó que el movimiento de 1968 simboliza una lucha de gran trascendencia. Precisó que “es un eslabón, el más significativo en nuestra historia reciente, de la larga cadena de mexicanas y mexicanos que han ofrendado su sangre para construir un país justo y democrático”; empero, dijo, aún no se ha castigado a los culpables de esa masacre.

Resaltó que el movimiento estudiantil también fue un ejemplo de la lucha para mejorar la educación, la libertad de cátedra y la calidad de la formación profesional; “esta lucha sigue presente, y hoy cobra más importancia en las condiciones del mundo actual y del atraso que sigue marcando la vida nacional”.