“Incremento de las violencias contra las mujeres, niñas y niños durante el confinamiento por COVID19: una realidad en México”

Nacional

Desde la Red Nacional de Refugios, AC hemos informado el incremento en las atenciones y orientaciones brindadas desde el 17 de marzo del año en curso, fecha en que lanzamos la Campaña “Aislamiento Sin Violencia, ¡No Estás Sola!”.Hoy comunicamos que las atenciones y acompañamientos a mujeres, niñas y niños víctimas de violencias en el ámbito familiar se mantiene en incremento durante los dos primeros meses de cuarentena, tanto en la línea telefónica, redes sociales y las atenciones directamente proporcionadas por los 69 espacios de prevención, atención y protección que integran la Red Nacional de Refugios en México, atendiendo directamente a un total de 11,131 mujeres, niñas y niños lo que representa un incremento del 70% en comparación al mismo periodo del 2019.

Del 17 de marzo al 17 de mayo hemos brindado orientación y atención a través de nuestras líneas telefónicas y redes sociales a 4,153 personas, de las cuales el 69% son mujeres víctimas de violencias, el 2.85% instancias de gobierno, el 9% hombres y el 19% son redes de apoyo de la mujer víctima de violencias (hermana/o, hija/o, padre, madre, vecina, amiga, etc.) quienes expresan su preocupación ya que la mujer se encuentra con su agresor y no puede pedir auxilio, siendo a través de estas redes la forma que tienen de pedir ayuda.

Esto refleja lo que en diversas ocasiones hemos declarado desde la Red Nacional de Refugios, entre más tiempo se extienda el periodo de confinamiento menos posibilidades tendrán las mujeres de llamar, mandar mensaje y, por lo tanto, de realizar denuncias como algunas instancias gubernamentales y el propio presidente esperan suceda para reflejar que en realidad las violencias contra las mujeres han incrementado en el periodo del COVID-19, olvidando las múltiples formas de violencias de las que son víctimas las mujeres, aquellas que obstaculizan las denuncias y las solicitudes de auxilio desde antes de la contingencia y que con ésta se han acentuado al estar con sus agresores o dentro de familias donde las violencias son naturalizadas y justificadas e incluso invisibilizadas como ha sido en las recientes declaraciones del presidente.

Aunado a ello, pensar que a través del número de denuncias puede medirse el incremento de violencias contra las mujeres es una visión limitada y fuera del enfoque de género; lo que las mujeres desean de primera instancia al estar viviendo con un agresor es ya no estar con él, estar tranquilas, sin seguir recibiendo las diversas violencias contra ellas y, en su caso sus hijas e hijos.

Durante la cuarentena algunas mujeres han tenido que salir huyendo de sus casas a causa de las violencias machistas, durante este periodo, la Red Nacional de Refugios ha realizado 19 rescates a nivel nacional, cuatro en el

Estado de México, siete en el Ciudad de México, dos en Morelos, dos en Puebla, dos en Chiapas, uno en Guerrero y uno en Hidalgo, esto independientemente de las referencias a los espacios de protección y los ingresos a Refugios.

Asimismo, pese a que la Línea Mujer de la Ciudad de México reportó que las llamadas de emergencia u orientación habían disminuido un 7.8% en el mes de abril, datos generados por la Red Nacional de Refugios (en el mismo mes) reflejan que la entidad con mayor número de llamadas y mensajes de mujeres solicitando apoyo a causa de violencias fue la capital con un 27%, seguida del Estado de México con 17%, lo cual muy probablemente está relacionado con el 20.21% de las mujeres que nos han compartido que ya habían solicitado anteriormente apoyo a otra instancia, pero no recibieron el auxilio esperado.

El 64.97% de las mujeres sufrió violencia por parte de su pareja o esposo, y en su mayoría las solicitudes fueron: atención especializada e implementación de plan de seguridad ante las violencias vividas (18.92%), información de servicios para mujeres en situación de violencias (28.11%) y orientación ante situaciones de violencias (17.94%).

Durante los dos primeros meses del confinamiento los Refugios y sus Centros de Atención Externa, Casas de

Emergencia y de Transición integrantes de la Red Nacional de Refugios han acompañado y atendido a 6,978 mujeres (65.16%), niñas y niños (34.88%), teniendo un incremento del 77% en comparación al mismo periodo en

  1. Brindándoles atenciones integrales (psicológica, médica, jurídica, social, educativa, entre otras) a fin de restituir sus derechos y promover la autonomía.

El concepto de fraternidad familiar expuesto por el presidente de México resulta ilusorio, debido a que el 100% de las mujeres que ingresaron a estos espacios de protección fueron víctimas de violencia familiar y el 5% de las niñas y niños víctimas de abuso sexual durante el confinamiento. El 48% de las hijas e hijos de las mujeres que solicitaron apoyo fueron víctimas de agresiones dentro de sus casas durante el periodo de cuarentena, por lo que no en todas las familias mexicanas se convive con armonía.

Las mexicanas son atravesadas por diversos tipos de violencias, algunas invisibilizadas por el Estado. El 100% de las mujeres que acudieron a los espacios de protección y atención integrantes de la Red Nacional de Refugios vivieron violencia psicológica, 49.47% física, 43.37% económica, 25.95% patrimonial, 17.62% sexual y 4% sufrieron intentos de feminicidio. El 79% de las mujeres atendidas en Refugios durante el mes de abril, viven dos o más tipos de violencias, destacándose entre ellas la violencia emocional, económica y física.

Durante la contingencia sanitaria más de la mitad de los Refugios a nivel nacional han tenido un incremento del 50% de ingresos. De igual forma, los Centros de Atención Externa han incrementado sus atenciones durante la cuarentena, la mayoría registraron un incremento del 50%, en estos espacios especializados que son la cara pública de los Refugios, el 31.48% de las mujeres fueron atendidas de forma presencial, con las medidas sanitarias pertinentes, mientras el 57.98% se atendieron vía telefónica y 10.52% redes sociales.

El Gobierno Federal ha empezado a hablar de iniciar la “nueva normalidad”, sin embargo, hay dos puntos importantes a reflexionar, el principal es que las mujeres y niñas lastimadas y agredidas durante la cuarentena no regresaran a la normalidad incluso quienes fueron asesinadas ya no regresaran. El segundo es, que seguimos sin tener o por lo menos conocer, por parte del Gobierno mexicano un protocolo de actuación integral coordinado e intersectorial con enfoque de género, derechos humanos e interculturalidad para atender los impactos y secuelas que el COVID19 ha dejado y seguirá dejando (aún después de levantarse la etapa del confinamiento) en la vida de las mujeres mexicanas.

Al respecto, la ONU ha expresado que la pandemia del COVID-19 podría causar una reducción de un tercio en el progreso hacia el fin de la violencia de género para 2030. Además, señala que otros impactos serían: por cada 3 meses que continúe el confinamiento habrá 15 millones adicionales de casos de violencia de género y, como consecuencia de la cuarentena podría haber hasta 15 millones de embarazos no deseados.

Desde la Red Nacional de Refugios, AC al realizar un análisis con enfoque de género sin duda México no será la excepción ante el innegable incremento de las violencias contra las mujeres durante el confinamiento, por lo que predecimos un incremento en las solicitudes de servicios esenciales, demandas de atención, denuncias y violencias contra las mujeres, niñas y niños post COVID19, esto por el mayor riesgo en el que están las mujeres por su implicación muchas de ellas, en empleos informales, también por lo que algunas de las mujeres que han logrado contactarse nos han expresado, haber decidido dejar pasar la cuarentena para poder salir de su casa, pues les da miedo que se puedan “contagiar ellas y sus hijos del coronavirus”.

El COVID-19 no sólo ha incrementado las violencias, también ha dificultado los procesos jurídicos, médicos y sociales de mujeres residentes y ex usuarias de Refugios así lo reflejan el 69% de los espacios de protección a nivel nacional, y por supuesto de aquellas que siguen estando con el agresor.

Por todo lo anterior, es urgente que el presidente de México y las 32 entidades federativas reconozcan que el confinamiento por COVID-19 ha incrementado las violencias contra las mujeres y las brechas de desigualdad. Les instamos a implementar de manera apremiante políticas presupuestarias con enfoque multisectorial transversalizando la perspectiva de género, que contemplen el acceso a la justicia, la salud integral, la educación y recuperación económica, entre otras; garantizando la atención y seguridad integral así como la protección de los derechos de todas las mujeres, niñas y niños durante y después de la contingencia sanitaria, siendo indispensable para ello, involucrar a las organizaciones de la sociedad civil en el desarrollo de las políticas y respuestas operativas frente a la doble pandemia de las que son víctimas las mujeres e infantes: el COVID-19 y las violencias de género.