Family Romance: las vicisitudes de un falso padre de familia

Cultura

Al director Werner Herzog no le gusta hablar de sus películas. Prefiere que el público las descubra con una mirada pura, sin la influencia que podrían tener sur palabras. Este cineasta atípico, uno de los grandes representantes del cine alemán de los años 1960-1970, firma el guion, los diálogos y la dirección de su nueva película, Family Romance, LLC., presentada en Proyección Especial.

Un hombre (Yuichi Ishii) es contratado para interpretar el rol del padre desaparecido de una niña de 12 años (Mahiro Tanimoto). Con la puesta en escena de este amor familiar creado artificialmente, Werner Herzog muestra los engranajes de un fenómeno procedente del Imperio del Japón, una nueva profesión inventada por el actor de la película, Yuichi Ishii, quien en la vida real es «actor de vida cotidiana». Y es que en Japón, para él, las apariencias lo son todo. ¿Busca un padre ficticio para representar a su hijo en la reunión del colegio? Yuichi Ishii, fundador hace diez años de la agencia Family Romance, se encarga de representarlo. ¿Necesita una amante para despertar celos? Yuichi Ishii le encuentra una. ¿Un tío lejano para asistir a una reunión familiar? Pues también. Para Yuichi Ishii, campeón de las interacciones humanas a la carta, las apariencias son lo más importante. Y estamos seguros de que hacer de actor en la película de Werner Herzog no le ha alejado mucho de su vida cotidiana, marcada por la representación.

Artísticamente cercano al expresionismo alemán, descubridor de territorios y llamado a veces «el cineasta de lo imposible» por sus rodajes difíciles (Aguirre, der Zorn Gottes [Aguirre, la cólera de Dios] en 1972, o Fitzcarraldo en 1982), Werner Herzog presenta con esta película una puesta en abismo metafórica sobre la actuación y la dirección de actores.