El representante especial del Secretario General para Libia renuncia a su cargo

Internacional

“El Secretario General de las Naciones Unidas ha recibido el mensaje de su representante especial para Libia en el que expresa su intención de abandonar el puesto”, explicó este lunes el portavoz de António Guterres durante su encuentro diario con la prensa.

Unas horas antes, el propio Ghassam Salame había anunciado su renuncia al cargo por motivos de salud en su cuenta de Twitter.

El diplomático explicó en ese tuit que durante dos años ha intentado volver a unir a los libios, “limitar las interferencias externas y preservar la unidad del país”.

Stephane Dujarric, portavoz de Guterres, afirmó que el titular de la ONU “siempre confió plenamente en el trabajo de Salame y en los grandes esfuerzos que hizo para llevar la paz a Libia”.

El vocero indicó que el Secretario General y Salame hablarán sobre cómo lograr una transición sin complicaciones para no perder el impulso de los logros alcanzados hasta este momento.

Durante su gestión, Salame intentó reanudar las conversaciones intra libias referentes a los ámbitos político, militar y económico.

El también jefe de la Misión de Apoyo de las Naciones Unidas en Libia (UNSMIL) había advertido que no podría lograr ningún progreso mientras continuaran las hostilidades.

En las últimas semanas, había insistido repetidamente en que se respetara la tregua que había sido aceptada por las partes del 12 de enero pasado.

Bombardeo en Trípoli

Durante el fin de semana, el titular de la ONU condenó enérgicamente el bombardeo indiscriminado de varias partes de Trípoli que tuvo lugar el pasado viernes e incluyó zonas residenciales y el aeropuerto de Mitiga, ubicado al este de la capital del país.

El Secretario General subrayó que, de conformidad con el derecho internacional humanitario, se debe proteger a los civiles en todo momento, pidió un cese inmediato de los enfrentamientos y la aplicación de la resolución 2510 del Consejo de Seguridad que “pone de relieve la importancia vital de avanzar hacia una solución política para poner fin al conflicto”.

El conflicto en el país petrolero del norte de África comenzó en 2011, cuando los opositores a Muammar Al-Qadhafi derrocaran a ese Gobierno gracias al respaldo de una coalición liderada por la OTAN.