El Museo del Palacio de Bellas Artes inaugura la muestra Redes de vanguardia: Amauta y América Latina, 1926-1930

Cultura

El Blanton Museum of Art y el Museo de Arte de Lima, en colaboración con la Secretaría de Cultura y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), a través del Museo del Palacio de Bellas Artes, presentan Redes de vanguardia: Amauta y América Latina, 1926-1930.
Después de exhibirse en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Madrid, España, y en el Museo de Arte de Lima en Perú, esta exposición llega a las salas del segundo piso del Museo del Palacio de Bellas Artes, del 18 de octubre del presente año, al 12 de enero de 2020.
Redes de vanguardia: Amauta y América Latina, 1926-1930, incluye más de 250 piezas de artistas latinoamericanos conectados a través de la revista peruana Amauta, fundada y dirigida por José Carlos Mariátegui (Perú, 1894 – 1930), fue una de las publicaciones periódicas abierta a los debates estéticos y vanguardistas de la primera mitad del siglo XX.
Bajo el concepto curatorial de Natalia Majluf, historiadora de arte y directora del Museo de Arte de Lima, y Beverly Adams, curadora de Arte Latinoamericano del MoMA y del Blanton Museum of Art, esta muestra conformada por dibujos, esculturas, pinturas, fotografías, objetos de arte popular y documentos, no sólo reúne las obras que fueron reproducidas en la revista Amauta, sino que incluye una selección más amplia, inspirada en los puntos de inflexión que definieron a la publicación como una de las más influyentes del siglo XX.
A diferencia de otras revistas de vanguardia de la época, Amauta no fue producto de la expresión de un grupo, ni buscó imponer un único programa estético o político, sino que fue un medio de exploración de los movimientos artísticos que pudieran transformar la sociedad de los años veinte.
Por lo mismo, no se limitó a los debates locales —aunque su repercusión en diversas regiones de Perú fue importante—, sino que emprendió un diálogo con movimientos americanos y europeos. Una gran red de agentes y corresponsales en América Latina y Europa contribuyó a nutrir la revista, que tuvo un tiraje de entre tres y cuatro mil ejemplares mensuales, y a definir su impacto internacional.
La exposición Redes de vanguardia: Amauta y América Latina, 1926-1930 propone una nueva narrativa sobre las vanguardias latinoamericanas de los años veinte desde la perspectiva de esta publicación. Por medio de una selección de las obras de artistas incluidos en la revista o de aquellos cuyas ideas definieron el contexto para los debates que se libraron en sus páginas, la muestra sigue la trama de referencias que forjó la propuesta de Amauta en el campo de la plástica.
Los ejes de la discusión de la revista se centraron en asuntos de gravitación continental, como el indigenismo, la transformación del campo artístico, la idea de vanguardia, el antiimperialismo y los vínculos precisos que el arte podía establecer con la acción política. Desde distintos puntos de América y de Europa, los amigos y corresponsales de Amauta afirmaron la idea de un arte comprometido y establecieron la noción misma de América Latina como una región con lazos culturales y proyectos políticos compartidos. La exposición recupera así capítulos olvidados del arte de los años veinte y revela la importancia de la mirada plural y heterodoxa de Mariátegui, que permanece hasta hoy como un referente clave en la discusión cultural en América Latina.
Dividida en cinco núcleos temáticos, la muestra incluye trabajos de artistas como Ramón Alva de la Canal, Camilo Blas, Norah Borges, Martín Chambi, Julia Codesido, Elena Izcue, Agustín Lazo, Carlos Mérida, Emilio Pettoruti, Diego Rivera, José Clemente Orozco, José Sabogal, Tina Modotti y Alejandro Xul Solar, entre otros.
El camino que siguió José Carlos Mariátegui para formar este proyecto editorial se ve reflejado en El nacimiento de Amauta, nombre del primer núcleo de esta exhibición. El apartado transita entre su estancia en Europa, de 1919 a 1923, donde definió su perspectiva sobre la escena internacional y el arte de su tiempo, así como su fijación por fundar una revista —que en primera instancia llevaría el nombre de Vanguardia—, sus relaciones de amistad con artistas futuristas, constructivistas, dadaístas y de diversas vanguardias, su regreso a Perú, hasta la creación de Amauta en 1926. Una de las piezas centrales es el retrato de Mariátegui pintado por Emilio Pettoruti, además de obras de artistas como Alexander Archipenko, George Grosz y Alexei Jawlenski.
Por su parte, Imaginar la vanguardia, segunda sección de la exposición, explora la evolución de la idea de vanguardia conforme fue surgiendo en distintos puntos de América Latina, especialmente en Argentina, México y Perú. A lo largo de este apartado se presenta una selección de obras relacionadas con el movimiento estridentista en México, en diálogo con obras de la vanguardia argentina, principalmente de Emilio Pettoruti y de Xul Solar, así como la pintura de Carlos Quizpez Asín, y obra de ilustradores como Emilio Goyburu, Juan Devéscovi y César Moro. Asimismo, cobra fuerza la participación de las mujeres como poetas, activistas e ilustradoras en el espacio de la vanguardia peruana y en particular en Amauta.
La imagen política, tercer apartado de la exhibición, narra la importancia que Mariátegui le dio a la política como elemento clave de la idea de vanguardia y que abordaría en las páginas de la revista. Defendió el indigenismo, incluso cuando la pintura de esta temática fuera en tono de denuncia. También difundió la obra del grupo de pintores, escultores y grabadores argentinos que hoy se conocen como los “Artistas del pueblo”, por su compromiso político y por su cercanía a revistas como La Campana de Palo y Claridad, y de quienes se presentan obras en la muestra. De igual modo, Amauta asumió el muralismo como uno de los modelos más importantes para el arte de vanguardia en América Latina, por lo que se consideran obras de artistas como David Alfaro Siqueiros, Diego Rivera y José Clemente Orozco, entre otros.
El penúltimo núcleo de esta muestra, La política del arte popular, explora el anti-academicismo como uno de los ejes de las vanguardias latinoamericanas y destaca el rescate del arte popular como un elemento clave de esa idea de ruptura. El surgimiento de una nueva pedagogía artística contra los preceptos académicos fue una de las propuestas en las páginas de Amauta. Desde México se difundió un modelo estético inspirado en el ideal de un arte proletario y popular: los Centros Populares de Pintura, las Escuelas de Pintura al Aire Libre y la Escuela Libre de Escultura y Talla Directa, dirigidos a obreros y campesinos, que buscaban incorporar nuevas clases sociales a la educación artística y transformar los métodos de enseñanza. Amauta recogió imágenes y ensayos de artistas y críticos asociados al grupo de pintores ¡30-30!, como Gabriel Fernández Ledesma y Martí Casanovas, quienes tuvieron también una estrecha relación con la célula de la Alianza Popular Revolucionaria Americana de México.
Finalmente, en Indigenismo como vanguardia, núcleo con el que cierra la exposición, se encuentran algunas de las obras clave para comprender el pensar de la revista y sus participantes —entre ellos José Sabogal— en torno al movimiento indigenista revolucionario, con el que la publicación se identificaría cada vez más en su última faceta. En este espacio es posible observar piezas de artistas peruanos como Camilo Blas, Julia Codesido, Martín Chambi y Jorge Vinatea Reinoso, en diálogo con obras de artistas como Jean Charlot, Diego Rivera y Carlos Mérida.
Herramientas de mediación y actividades paralelas
Con el fin de crear una experiencia más significativa y de acercar a diversos públicos, el Museo del Palacio de Bellas Artes ha diseñado una serie de herramientas de mediación: videos en Lengua de Señas Mexicana (dirigido a personas sordas o con discapacidad auditiva); cédulas introductorias en cada sala en lengua náhuatl; video en el que se proyectarán las 32 portadas de la revista; mapa que explorará la relación de los personajes involucrados en la revista Amauta con José Carlos Mariátegui; línea del tiempo; material audiovisual sobre el contexto político de México, Perú y Argentina, así como sus revistas culturales más relevantes; facsimilares de la revista Amauta; catálogos de la exposición para consulta de los visitantes; aplicación para dispositivos móviles ArtGuide; audioguía interactiva y un folleto digital en torno a la muestra.
Asimismo, la exposición contará con actividades enmarcadas en el programa Bellas Artes para todos, que busca acercar a diversos públicos a la cultura y el arte de forma lúdica y didáctica, mediante recorridos y actividades mediadas para público escolar, adultos mayores, familias y personas con discapacidad.
Se ha desarrollado un programa de actividades paralelas que invita a los visitantes a profundizar en temas específicos de la exposición mediante un recorrido virtual y la presentación de una publicación que lleva por título el mismo nombre de la exhibición, dedicada al lugar de las artes plásticas en la revista Amauta, así como a explorar el impacto que tuvo en los círculos artísticos, políticos y literarios en América Latina.
Editado con el apoyo de la Fundación Mary Street Jenkins, el libro incluye ensayos de autores de distintas generaciones y países que abordan los debates estéticos de la revista, entre ellos las artes gráficas, la industria editorial, el arte popular, la política revolucionaria, la pedagogía y las redes intelectuales que le dieron forma. También ofrece una cronología ilustrada de la vida y labor del fundador de la revista, José Carlos Mariátegui, una investigación de las publicaciones y los contactos que estableció para ampliar la difusión de la publicación a nivel regional y continental.
Asimismo, se realizará el coloquio Redes de vanguardia latinoamericana en el arte mexicano: 1923-1930, el viernes 18 de octubre, a partir de las 10:00 horas, en la Sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes. Organizado por el Museo del Palacio de Bellas Artes y el Instituto de Investigaciones Estéticas de la UNAM, contará con la participación de especialistas como Alberto Enríquez Perea, Andrea García Rodríguez, Arantza Arteaga, Dafne Cruz Porchini, Julio César Merino Tellechea, María Alejandra Triana, Natalia Majluf, Omar Alfonso Flores Tavera, Rebeca Barquera, Renato González Mello, Rita Eder, Sandra Zetina y Zyanya Ortega.
El Museo del Palacio de Bellas Artes agradece el apoyo de la Fundación Mary Street Jenkins para la realización de este libro que podrá ser adquirido en la tienda del Museo del Palacio de Bellas Artes, ubicada en el primer piso del recinto.
Toda la información sobre la exposición y las actividades se podrá consultar en la página web (www.museopalaciodebellasartes.gob.mx) y en las redes sociales del museo (Facebook: Museo del Palacio de Bellas Artes e Instagram, Twitter y Spotify: @mbellasartes).