El Museo de Arte Moderno celebra el centenario del muralismo con curso en varias sesiones

Cultura
  • El curador Carlos Segoviano, del recinto del Inbal, analiza los antecedentes artísticos en México; las inscripciones continúan abiertas

¿Cómo inició el movimiento muralístico mexicano? ¿Quién hizo el primer mural? ¿Cuál fue la técnica que se usó? Estas son algunas de las preguntas que se abordaron en el curso 100 años de Muralismo Mexicano, el cual continúa en el Museo de Arte Moderno (MAM), los martes hasta el 15 de noviembre, de 12:00 a 13:30 horas, y al que el público puede inscribirse. 

Cuando José Vasconcelos se convirtió en el primer secretario de Educación Pública, tenía claro algunos de los programas que quería impulsar, había dado una serie de conferencias en Argentina, estaba al frente de la Universidad Nacional y escribía su libro La Raza Cósmica, pero todavía no tenía una idea sobre el proyecto artístico que quería emprender, explicó el investigador del MAM, Carlos Segoviano, durante la primera sesión. 

Fue entonces que convocó a una serie de artistas, muchos de ellos formados en la Academia de San Carlos o en las Escuelas de Pintura al Aire Libre. Años atrás, el arte mexicano reproducía en gran medida los modelos clásicos europeos y el país era estetizado en las obras a partir de esos principios. 

Un ejemplo de ello son los paisajes del italiano Eugenio Landesio, profesor de la Academia de San Carlos y una de las luminarias del arte mexicano. José María Velasco, a diferencia de Landesio, conjuntaba la mirada artística con el ojo científico, lo cual se puede comprobar en las láminas de botánica y zoología que hoy resguarda el Museo Nacional de Arte (Munal) y que están expuestas de forma permanente.  

En 1911 los alumnos de San Carlos emplazaron a una huelga que denunciaba el anquilosado método de instrucción y demandaba una democratización de la enseñanza artística. Fue cuando el pintor regiomontano Alfredo Ramos Martínez, recién llegado de Europa y empapado de los movimientos de vanguardia, asume la dirección de la institución e impulsa la primera Escuela de Pintura al Aire Libre de Santa Anita (Iztapalapa), donde hombres y mujeres de diferentes clases sociales podían acceder a la instrucción artística.  

En la escuela de Ramos Martínez también participaron Fermín Revueltas, Roberto Montenegro, Gerardo Murillo Dr. Atl, Louis Henri Jean Charlot, Ramón Alva de la Canal, Gabriel Fernández Ledesma y Rosario Cabrera. 

Durante la Revolución, que ocurría en aquella época, diferentes artistas participaron desde su trinchera, José Clemente Orozco, por ejemplo, hacía ilustraciones para el periódico carrancista La Vanguardia y David Alfaro Siqueiros fue soldado en el Ejército Constitucionalista, por cierto, ambos alumnos de Dr. Atl. Diego Rivera, por su parte, todavía se encontraba en Europa. 

Hacia 1919, Siqueiros, quien había retomado sus estudios de arte, viajó a París donde conoció a Rivera, quien lo introdujo en las vanguardias, en tanto se enteraba sobre el movimiento revolucionario. Durante aquel viaje, ambos bosquejaron el Primer Manifiesto del Arte Mexicano, que Siqueiros daría a conocer en 1921 desde Barcelona, España, y que sería clave para el muralismo, detalló el curador. 

El Colegio de San Ildefonso, cuna del muralismo mexicano

Cuando Diego Rivera llegó a México por solicitud de Vasconcelos, el secretario de Educación Pública ya había firmado contrato con otros artistas, entre ellos Ramón Alva de la Canal y Fermín Revueltas, quienes también iniciaron sus murales a mediados de ese año en el Colegio de San Ildefonso, cuna del muralismo mexicano.  

El problema que tuvieron todos, incluido Rivera, es que ninguno conocía la técnica mural y no podían avanzar en su obra. Fue entonces cuando Xavier Guerrero, pintor y muralista coahuilense, de formación autodidacta, y que trabajaba como ayudante de Rivera, le enseñó al guanajuatense la técnica correcta al fresco. 

¿Quién fue el primer muralista de México? La disputa se la llevan Roberto Montenegro, Gerardo Murillo y Diego Rivera. Montenegro finalizó el mural El árbol de la vida, en 1921, una alegoría al ser humano como centro del universo, año en que Murillo también finalizó sus murales (los cuales no se conservan) en el mismo recinto, el hoy Museo de las Constituciones; sin embargo, se ha considerado que el primer mural fue La creación, que Diego Rivera pintó en el anfiteatro de San Ildefonso.  

Cabe aclarar que a estas obras Vasconcelos les puso objeción, sobre todo a las de Montenegro y Murillo, porque ninguna de ellas representaba el proyecto estético que él quería impulsar. A Diego Rivera, por ejemplo, lo mandó de viaje para conocer el país.  

Al mismo tiempo, se considera que Fernando Leal, junto con Fermín Revueltas, fueron los primeros muralistas en pintar temas mexicanos y materializar el proyecto estético de Vasconcelos.  

Estos y otros detalles se continuarán revelando durante el curso, cuyos próximos temas ahondarán en la obra de Diego Rivera, José Clemente Orozco, David Alfaro Siqueiros, de otros artistas contemporáneos y el papel de las mujeres que participaron en el movimiento. Las inscripciones e información se pueden solicitar en el correo: laura.g@mam.org.mx El museo se ubica en Reforma y Gandhi, Bosque de Chapultepec.