COPARMEX pide al presidente preservar empleos y apoyar a las MIPYMES

Finanzas

En la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX) diseñamos con tiempo, diversas propuestas que se presentaron al Gobierno Federal, para enfrentar la crisis sanitaria y económica, con dos grandes prioridades:
1.- La protección del empleo y el ingreso de las familias mexicanas.
2.- La recuperación rápida de la economía.
Por ello estaremos atentos al mensaje que dirigirá al país el Presidente Andrés Manuel López Obrador este domingo 5 de abril a las 5 de la tarde, hora del centro, y en el que se espera anuncie un “Plan de reactivación económica” para mitigar los efectos de la pandemia del coronavirus COVID-19.
Sin embargo, hasta donde se sabe, la idea del presidente de la República es la misma desde que inició su Gobierno: apoyos para la subsistencia, pero no para conservar las empresas para que estas puedan crecer en empleos.
A pesar de este sombrío escenario, el Gobierno Federal encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador se ha negado a escuchar, a realizar un ajuste razonable a su agenda política en función de las circunstancias, y a modificar su discurso de polarización por uno de unidad.
El Presidente desperdició semanas enteras negando la seriedad de la pandemia, convocando irresponsablemente a eventos masivos sin acatar las medidas básicas de prudencia, como la sana distancia.
Tampoco quiso dialogar oportunamente con los representantes de los sectores productivos del País que le presentamos un amplio y fundado paquete de propuestas, para enfrentar juntos la emergencia sanitaria y sus secuelas económicas. Para el titular del Poder Ejecutivo Federal, primero son sus obras faraónicas, y solo después todo lo demás.
Los precriterios económicos que presentó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público al Congreso de la Unión, prevén un recorte de al menos 405 mil millones de pesos para el presupuesto 2021 del país (por la caída en los precios del petróleo y de la recaudación de impuestos).
Sin embargo, el presidente ya los descalificó en una conferencia matutina, porque, al parecer no le agradó que en los mismos se prevea un decrecimiento de hasta 3.9 por ciento de la economía mexicana para 2021, que sería el tercer año de su mandato, es decir, la mitad de su Gobierno.
Los planes de la presente administración federal, históricos para unos, y absurdos para otros, ya perdieron sentido ante la presente coyuntura. En
cambio, al Presidente de la República parece no importarle que sufran las MIPYMES, que pagan los impuestos con los que opera el Gobierno, que generan 7 de cada 10 empleos, con lo que subsisten las familias de 18.1 millones de trabajadores.
Los gobiernos de todo el mundo, salvo el de México, están priorizando ante la crisis, la protección del ingreso de las familias, tratando de salvar el mayor número de empresas posibles. Pero el Gobierno mexicano sólo vislumbra inyectar créditos por 63 mil 700 millones de pesos, que, vía banca de desarrollo, equivalen a 1.4 por ciento del gasto programable para 2021 y al 0.2 por ciento del PIB del mismo año.
Es notorio que al titular del Poder Ejecutivo Federal le disgustan las ideas que no provengan del interior de su Administración. Que no le gusta escuchar voces divergentes.
Ejemplo de ello es que hizo caso omiso del paquete de propuestas que el Sector Empresarial le entregó desde hace cerca de un mes, para implementar una serie de medidas contundentes e inmediatas, que fortalezcan la economía nacional con mayores condiciones de confianza y certidumbre, para lograr la recuperación del crecimiento económico que tendrá que llegar después de la crisis.
Si su gobierno rectifica y apoya a las empresas, en realidad está apoyando de manera duradera a las familias. A que conserven sus empleos y con ello sus ingresos. A que no necesiten de programas sociales para subsistir. Que lo sigan haciendo con dignidad, a partir del valor de su trabajo.
En la COPARMEX creemos que México requiere de la colaboración y la solidaridad hacia un líder con visión de Estado, que libre de ideologías y prejuicios, brinde confianza, serenidad y firmeza a la ciudadanía y al sector productivo. Necesitamos de un verdadero estadista que, con racionalidad, tome las medidas precisas, sensatas y necesarias, en urgente apoyo de la salud y la economía de todas y todos los mexicanos.
Presidente López Obrador: siga el ejemplo de los médicos y las enfermeras de este País, que atienden a todos sin más consideración que la mejora de su salud. Actúe como lo hacen los soldados y marinos en las emergencias, que velan por la vida de todos por igual, sin cuestionar su nivel económico, ideas o convicciones.
Asuma el carácter de Jefe de Estado, que por encima de su proyecto político personal, coloca los intereses más altos de la Nación.
Si actúa así, no lo dude, todos lo vamos a apoyar y todos se lo vamos a reconocer.