Carece México de una política de Estado que acompañe a los maestros en su labor ante la pandemia

Nacional

Desde el inicio de la pandemia, México careció de una política de Estado, de una estrategia nacional que les permitiera a sus docentes tener las herramientas técnicas y educativas necesarias para acompañar adecuadamente en su labor académica a los estudiantes del país en todos los niveles, en especial a los de educación básica.

Lo anterior es una emoción grave cuyas consecuencias las veremos en poco tiempo, con importantes deficiencias educativas, ausencia en la calidad educativa y un nivel de deserción escolar cuyos datos aún desconocemos.

Lo anterior exige además un importante esfuerzo en el trabajo por estudiar y procurar la defensa de los derechos humanos en el actual entorno educativo de México, e incorporar éstos a una educación con perspectiva en un modelo que podría ser hibrido en el futuro.

Especialistas en temas de derechos humanos dentro del sector educativo, coincidieron en afirmar lo anterior e hicieron hincapié en la necesidad de acompañamiento financiero al sector educativo, ya que de lo contrario “las leyes y los discursos se quedan en buenas intenciones”, al participar en la conferencia Derechos Humanos y el Sistema Educativo, convocado por México Justo.org AC.

Alma Maldonado-Maldonado, investigadora del Cinvestav del IPN y profesora de la UNAM, aseguró que resulta fundamental buscar cómo crear los instrumentos para garantizar la protección de los derechos humanos y los derechos a la educación en su expresión más amplia que se definen en nuestras leyes.

Explicó que es necesario reconocer la importancia perspectiva de derechos humanos en la educación y reconocer que tenemos un problema de aplicación y cumplimento de los acuerdos internacionales que firmamos como país en la materia.

Destaco que México tiene una seria limitante en materia de calidad educativa y de las condiciones que nos permitan identificar dichas limitantes, por lo que no existen mínimos de calidad y reglas para cumplirlos.

“Además sino contrastamos nuestras leyes y estrategias con recursos financieros y contra otras agendas los argumentos oficiales de desarrollo educativo se caen”

Juan Carlos Pérez Góngora, presidente de México Justo.org AC, también destacó la necesidad de presupuestos claros y suficientes, así como la responsabilidad de los padres también en la educación académica de los hijos.

En materia legislativa, puso el ejemplo de Taiwán y de China en donde recientemente se dispuso legalmente que los niños sólo podían tener acceso a tablets por dos horas al día y únicamente entre las ocho de la mañana y las 10 de la noche, a riesgo de multas para los padres de familia.

Por su parte Luis Ortiz Monasterio, embajador en retiro, reconoció que México México aún tiene serias carencias en materia de difusión de los derechos humanos dentro de su sector educativo, al grado de convertirse “en un país de derechohabientes” en donde todos sabemos que tenemos derechos pero desconocemos nuestras obligaciones en la materia.

“Más que una disciplina benévola, los derechos humanos son una puerta de entrada para capacitar en temas varios en pro de la democracia”, por lo que resulta fundamental que los legisladores, al mejorar el marco legal en los derechos humanos en el sector educativo, definan responsabilidades financieras es decir que las leyes “vengan etiquetadas” con recursos para que sea posible su adecuada procuración.

Dijo que los estudios a distancia tienen un enorme potencial por el alcance que poseen y considera que en el futuro podría haber un modelo híbrido de educación, es decir que se trata de un “sistema que llego para quedarse”.

Al respecto, Jorge Arturo Jiménez, del Centro Educativo Trupper del museo Memoria y Tolerancia, aseguró que este modelo de educación digital tiene sin embargo carencias importantes, ya que es excluyente debido a las propias condiciones de acceso a tecnología y de recursos de miles de niños y jóvenes mexicanos que no tienen la posibilidad de acceder totalmente al modelo.

El especialista afirmó que la mejor forma de garantizar la aplicación cabal de los derechos humanos dentro del sistema educativo es con la práctica diaria por parte del profesorado y las autoridades educativas en todos los centros escolares, debido a que todavía en México se dirimen muchas situaciones de derechos de los alumnos bajo un modelo sancionador más que basado en la reconciliación.

“La pandémica ha puesto en hilos delgados al sistema educativo y al modelo para atender las condiciones de vulnerabilidad de diversos grupos, situación en la cual la congruencia del profesor frente al grupo resulta sumamente importante”.  Los derechos humanos no se enseñan solo con una materia, es fundamental su ejercicio práctico constante.

En tanto, Adriana Elizabeth Ozuna, directora general del Consejo para la Convivencia Escolar del Estado de México, advirtió sobre lo que llamo un “alarmante” aumento en los niveles de violencia familiar a partir del inicio de la pandemia en México.

Es necesario, agregó, un importante esfuerzo para trabajar conjuntamente con los padres de familia, desarrollar muevo modelos de educación en donde se destaquen las habilidades socioemocionales de los alumnos, además del reforzamiento con civismo, ética y capacitación a docentes sobre dinámicas educativas para reforzar el mensaje de los derechos humanos.

La bienvenida a esta conferencia fue hecha por Genaro Góngora Pimentel, presidente del Consejo Académico de México Justo.org AC.