ATL. Fuego, tierra y viento; sublime sensación, primera exposición autónoma de la obra de Gerardo Murillo en el Munal

Cultura

Figura emblemática, hombre volcánico, sublime científico que supo atrapar la atención de su tiempo, así calificó la directora del Museo Nacional de Arte (Munal), Carmen Gaitán, a Gerardo Murillo Dr. Atl, artista cuya obra es el eje de la exposición ATL. Tierra, viento y fuego; sublime sensación, la cual será inaugurada el jueves 11 de abril en el recinto del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL).
El Dr. Atl fue un creador que “inauguró nuevas técnicas pictóricas y visuales”, refirió Carmen Gaitán durante un recorrido por la muestra y agregó que la exposición presenta dibujos provenientes de los estudios que Murillo realizó al pie del Paricutín durante dos años, tiempo en el que perdió una pierna por las condiciones tan riesgosas en las que trabajaba.
El Munal fortalece su misión con la preservación, exhibición y difusión de sus colecciones representativas de producción artística en México, al tiempo que hace una revisión de sus fondos, por lo que esta muestra, cuyo discurso se encuentra fincado en el paisaje panorámico, vertiginoso, orográfico y telúrico, se organiza a partir de una selección del Fondo Atl adjudicado al recinto por el INBAL en 2007.
La muestra se nutre de una selección de 70 dibujos a lápiz y al carbón realizados por Gerardo Murillo, pertenecientes a la adjudicación Atl de 147 obras sobre papel al Munal, del 17 de diciembre de 2007, y procedentes de los fondos artísticos y nacionales del INBAL.
ATL. Fuego, tierra y viento; sublime sensación, a cargo de Víctor Rodríguez Rangel, curador del acervo del siglo XIX del Munal, cuenta con 104 piezas pertenecientes al acervo del Munal, cinco piezas de colecciones particulares y otra más del Museo de la Acuarela.
El curador resaltó que hace 20 años se presentó la última exposición de Dr. Atl en el Munal y que la característica de la actual exhibición es que se cimenta en los dibujos del Fondo Atl.
“Llegaron 147 dibujos sobre series que muestran el nacimiento del Paricutín y otros sobre cordilleras, cráteres y montañas. Estos, por primera vez, son la base de una exposición, que además incluye 22 pinturas de colecciones del recinto y privadas”.
Los núcleos temáticos de ATL. Fuego, tierra y viento abordan las representaciones del telúrico nacimiento y erupción de Paricutín, en Michoacán, durante los años de 1943 a 1945. La fase paisajística del Dr. Atl, en asociación con sus aficiones por la geología, la vulcanología y la expresión misma del poder de la naturaleza, que alimentaba su inquietud filosófica y mística, se manifiestan en inigualables producciones artísticas de dramática y expresiva esencia.
El seguimiento y observación del Dr. Atl, realizada día a día sobre este fenómeno que acaparó la atención mundial está presente en ciertas piezas con acotaciones sobre el registro del desarrollo de la actividad del volcán, propias de las ciencias naturales.
Al importante conjunto pictórico de monumentales paisajes del Dr. Atl se suman producciones plásticas de Eugenio Landesio, José María Velasco, Carlos Rivera, Cleofas Almanza, Joaquín Clausell, Francisco Goitia, Luis Nishizawa, Pedro Flores, Mario Almela y Jorge Obregón, que conforman una secuencia de casi un siglo y medio (1870-2016) que se descifra con naturalidad al entender las sutiles modalidades conceptuales, estilísticas y técnicas propias de las asociaciones de los creadores con sus contextos artísticos.
La exposición de un conjunto amplio de este importante lote no había tenido lugar en el Munal como una exhibición autónoma, por lo que la producción pictórica como acento de los cuatro órdenes temáticos resulta espectacular para el visitante. Dos polos opuestos: violencia volcánica y serenidad campestre y alpestre invitarán al público a contemplar serenos panoramas bucólicos de valles, nevados y bosques montañosos plasmados por diversos artistas mexicanos.
A la par de los señoriales lienzos y meticulosos trabajos dibujísticos de un artista patrimonial, considerado monumento histórico y artístico de México, como el Dr. Atl, se apreciarán estudios preparatorios para sus composiciones paisajistas en un ejercicio que revelará otra importante faceta de su producción.
La enérgica interpretación artística del violento nacimiento y desarrollo del Paricutín da pie a escenas dantescas de fuego, gases y lava. Las claves del paisaje sublime, son destacadas en estos panoramas y vistas que más que dantescas, amenazantes o violentas sensaciones, trasmiten al espectador las sugestivas cualidades poéticas y naturalistas no sólo del Dr. Atl, sino de exponentes como Almanza, el último gran genio del paisajismo académico decimonónico en la línea Landesio-Velasco-Almanza, a lo que se agrega la contemporánea y fresca visión de Almela.
Diez dibujos al carbón y al grafito, piezas con acotaciones puntuales, croquis y panoramas cargados de inscripciones sobre fechas y características de la manifestación volcánica y telúrica guardan un fascinante vínculo entre las anotaciones científicas de un geólogo o vulcanólogo y el inigualable acento plástico y sugestivo del Dr. Atl como paisajista nato.
A partir del monumental óleo Paisaje con volcán, de la colección Maricarmen y Jorge Ramos, se hace un correlato curatorial con ocho dibujos, impresos y un cuerpo de fotografías, además de la pintura La sierra del Dr. Atl y Gigantes de México de Pedro Flores.
La presentación de una publicación que servirá como guía al público visitante, la proyección de videos y de una película de Jaime Kuri, así como actividades de mediación para niños y académicas, se desarrollarán de manera paralela a la muestra hasta el 2 de julio, fecha en la que concluirá su periodo de exhibición.