La Cámara de Diputados aprobó modificar la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, para definir como violencia infantil, toda forma de perjuicio o abuso físico o mental, abandono, descuido o trato negligente, malos tratos o explotación, incluido el abuso sexual.
El dictamen, avalado con 403 votos y turnado al Senado de la República para sus efectos constitucionales, adiciona una fracción XXX al artículo 4 de dicha norma, para incluir lo que se entenderá como violencia infantil para efectos de la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes.
El documento resalta que de acuerdo con un estudio del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) millones de niños en todo el mundo viven maltrato en su casa, escuela y comunidad y cada siete minutos es asesinado un adolescente.
En México, indica, seis de cada 10 niños menores de 14 años han experimentado alguna forma de violencia por parte de algún integrante del hogar.
Subraya que el maltrato infantil en México es un factor determinante de la deserción escolar y una causa importante de muertes infantiles, por lo que es necesario prevenirla y atenderla.
Al fundamentar el dictamen, la presidenta de la Comisión de Derechos de la Niñez y Adolescencia, diputada Rosalba Valencia Cruz (Morena), señaló que la violencia en contra de niñas, niños y adolescentes puede tener consecuencias irreparables y pasar de generación en generación. Cuando la sufren, aumentan de manera pronunciada las probabilidades de que vuelvan a ser víctimas de la misma o repitan el patrón de conducta.
El dictamen, dijo, tiene el objetivo de mejorar los derechos, condiciones de vida, desarrollo integral, sano esparcimiento y protección de niñas, niños y adolescentes que sufren maltrato.
Con la reforma, continuó, se busca que niñas, niños y adolescentes tengan una protección de manera integral y segura, no dejando ninguna situación que atente contra su integridad y sano desarrollo.
La promovente de la reforma, diputada Martha Elisa González Estrada (PAN), resaltó que esta problemática requiere atención urgente por parte de todos, de gobiernos y de la sociedad, porque en México, miles de niños, niñas y adolescentes, crecen en un contexto de violencia cotidiana que les deja secuelas profundas y un impacto negativo en su desarrollo y autoestima que incluso puede pasar de una generación a otra.
Sostuvo que gran parte de la violencia que incluye la física, sexual, psicológica, discriminación y abandono, permanece oculta, y en muchas ocasiones es socialmente aprobada. Sin embargo, ninguna está justificada y puede ser prevenida.
Explicó que el objetivo de la reforma, es fortalecer la legislación existente y atender el mandato constitucional que establece que en todas las decisiones y actuaciones del Estado, se velará y cumplirá por el interés superior de la niñez, garantizando de manera plena sus derechos.
