Alberto Híjar reflexiona sobre el legado teórico de Siqueiros y su experiencia literaria

Cultura
  • Las publicaciones destacan la militancia y la experimentación artística del muralista, a quien confronta en sus dos mundos: la política y el arte 

Siqueiros por Híjar y Susto perenne son los títulos que presentó el crítico de arte Alberto Híjar, en los cuales ofrece un análisis sobre el legado teórico y político del muralista David Alfaro Siqueiros y ofrece una serie de textos de corte autobiográfico en los cuales examina su desaparición forzada y encarcelamiento en Lecumberri debido a su militancia. 

Ambos libros, resultado de los talleres que imparte en el Centro Nacional de Investigación Documentación e Información de Artes Plásticas (Cenidiap) del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal), fueron presentados en el Aula Magna José Vasconcelos del Centro Nacional de las Artes (Cenart). 

Durante la presentación de los títulos, el investigador del Inbal, quien es heredero del pensamiento teórico de Siqueiros (signado de esta forma por el muralista), con el espíritu combativo y franco que ha caracterizado su carácter y quehacer, citó: “’Vivir de acuerdo a las leyes de la belleza’, esta es la frase contundente que me hizo entender que era mucho más importante la dimensión estética, llamada así por (Herbert) Marcuse, que la necesidad de transformar las relaciones de producción”. 

En la actividad también asistieron el investigador Miguel Ángel Esquivel, la especialista del Cenidiap, Guillermina Guadarrama, y su hija Cristina Híjar, el también filósofo explicó que su militancia no lo colocó en las glorias académicas, sino en una lucha continua y resaltó que los títulos son “un encuentro dialéctico entre la militancia comunista y la praxis estética, con los riesgos que esto implica”, pues recordó que a pesar de la represión y censura no abandonó la lectura y el análisis teórico, es decir, la praxis estética “sumamente fructífera”.  

Asimismo, relató la forma en que conoció a Siqueiros durante un mitin en Buenavista en 1958: “Quedé con la baba escurriendo. Esto no es un artista, no es un militante comunista, es todo eso y mucho más.  

“Poco tiempo después, en las mesas que la Universidad Obrera organizó para discutir el conflicto chino-soviético, donde Siqueiros, Joel Marroquín, Federico Silva y Antonio Rodríguez participaron, me acerqué a ellos, con mis notas me invitaron a construir un libro, fui a sus talleres y todos me tomaron como su compañero de militancia. Siqueiros en especial, que, con Angelica Arenal, me llena de esa poética necesaria, la cual no fue otra cosa que la praxis estética. En esas seguimos, la lucha sigue y es larga”.  

Miguel Ángel Esquivel detalló que algunos textos de Siqueiros por Híjar fueron escritos en la Sala de Arte Público Siqueiros, de la cual fue director. “Son textos que a través de las décadas nos han permitido observar un trabajo teórico, crítico, de historiografía del arte, histórico e incluso casuístico sobre David Alfaro Siqueiros”, pero también hacen una historiografía del arte mexicano, latinoamericano e internacional, a través de este artista. 

Por su lado, Guillermina Guadarrama destacó que en Siqueiros por Híjar, integrado por 18 textos, el investigador “da cuenta no solo de Siqueiros, sino de otros asuntos artísticos” que sucedieron en el país, como el apogeo de diversos movimientos artísticos, el surgimiento de la cuarta etapa del muralismo y la presencia de artistas poco conocidos o bien, desmenuza momentos como la famosa polémica (Diego) Rivera-Siqueiros o la amistad del artista con Pablo Neruda. 

“El libro no es una guía para leer a Siqueiros, sino que indica los puntos clave de la teoría siqueiriana para mostrarnos la grandeza de este artista” y agregó que en textos como Crítica a Siqueiros señala los vasos comunicantes entre su militancia, su creación, así como su experimentación artística y señaló que el autor “enfrenta y confronta a Siqueiros en sus dos mundos, sus dos principales razones de ser: la política y el arte”. 

Por su parte, Cristina Híjar explicó que Susto perenne es un testimonio del también teórico marxista como detenido y desaparecido. “Más de 30 años le tomó hacerlo” dijo y resaltó que el libro no es una vivencia personal, sino social y comunitaria