Con el objetivo de contar con una buena salud física, emocional y social que nos ayude a realizar nuestras actividades laborales en el marco de la nueva normalidad debido a la pandemia, el Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM) realizó la charla virtual En Conexión, con el tema: “Estar quemado por el trabajo o síndrome de desgaste ocupacional (Burnout)”.
El encuentro, presentado por la presidenta de la Comisión de Igualdad de Género y Derechos Humanos, la Consejera Electoral Carolina del Ángel Cruz, fue impartido por el especialista de la salud de la Facultad de Psicología de la UNAM, Dr. Emmanuel Martínez Mejía, y estuvo dirigido al personal del órgano electoral capitalino que realiza actividades laborales a distancia, presenciales y mixtas, así como a la comunidad de Radio Educación y a la ciudadanía en general.
En su ponencia, el Dr. en Psicología habló de las consecuencias de estar expuesto a los factores de riesgo psicosocial en el trabajo y el síndrome de Burnout es uno de ellos, el cual es un conjunto de signos y síntomas que afectan la salud de las personas trabajadoras.
Explicó que este síndrome representa un riesgo psicosocial laboral, porque se vive una situación de mucha tensión y estrés. “Es un estado de agotamiento físico, emocional y mental causado por la exposición a largo plazo de situaciones que son emocionalmente exigentes, representando un punto de ruptura, donde la capacidad de enfrentarse con el ambiente se ve obstaculizada”, advirtió.
Agregó que los riesgos psicosociales laborales son situaciones que tienen una alta probabilidad de dañar gravemente la salud de las personas, pues existe un claro riesgo de un trastorno mental, con afectaciones psicopatológicas o psiquiátricas.
Apuntó que de acuerdo con la Norma 035, los factores de riesgo psicosocial se pueden presentar por las condiciones en el ambiente laboral, las cargas de trabajo, la falta de control en el trabajo, jornadas excesivas, interferencia en la relación trabajo-familia, liderazgo negativo, relaciones negativas y violencia laboral.
Refirió que algunas de las consecuencias inmediatas que se manifiestan en términos físicos o psicosomáticos asociados al Burnout son, dolor de cabezada de manera reiterativa, consumo o incremento en los niveles de alcohol y/o tabaco, uso de drogas legales o ilegales, problemas de sueño, alimenticios, gastrointestinales o sexuales.
En este sentido, el Dr. en Psicología recomendó diversas acciones para atender el Burnout, en donde las empresas y las instituciones deben implementar una estrategia o una política de seguridad que incluya no sólo a la salud física, sino a la salud mental y social.
Indicó que para una mejor organización en el trabajo, se deben implementar acciones dirigidas a que el personal experimente la carga de trabajo como un desafió manejable; involucrar la plantilla laboral tanto en el diseño de trabajo como en la elaboración de las acciones sobre seguridad y salud laboral.
Además, se deben crear los mecanismos necesarios para proporcionar información clara y transparente dentro de la organización; formar a las personas trabajadoras para que se desempeñen adecuadamente de forma segura; implementar las estrategias apropiadas de atención y gestión de riesgos, en donde se incluyan los factores de riesgo psicosocial y, de manera general, contar con un enfoque de promoción de hábitos de vida saludable.
En conclusión, expuso que las organizaciones deben facilitar los mecanismos y las prácticas de seguridad y salud; en tanto que dentro de los grupos, quienes ejercen liderazgo como quienes le integran deben poner en práctica esa cultura, al tiempo que cada persona debe cuidar su integridad física y mental.
La siguiente charla En Conexión, se realizará el próximo lunes 23 de noviembre, a las 17:00 horas y abordará el tema: “Comunicación, reconocimiento y prácticas saludables en la relación líder-colaborador”.
